El Congreso retoma su actividad en medio de la ruptura del PP con el consenso sobre la limitación de la representación

El Congreso de los Diputados ha dado este martes los primeros pasos para retomar su actividad ordinaria tras el parón que ha supuesto el estado de alarma decretado por el coronavirus. Así, ha acordado levantar la suspensión de los plazos, celebrar un Pleno de Control al Gobierno la próxima semana e ir empezando a activar las comisiones parlamentarias.

Esta apertura de la actividad se produce después de las fuertes críticas de la oposición que reclamaba un mayor control a la actividad del ejecutivo.

De esta manera, previsiblemente el 15 de abril se celebrará una sesión de control al Gobierno y se debatirá el decreto ley con medidas de protección para víctimas de violencia de género.

No obstante, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha solicitado que se actúe con responsabilidad y que la representación de los grupos parlamentarios sea limitada para garantizar el distanciamiento preventivo para evitar contagios de coronavirus.

Sin embargo, el martes el PP ya anunció en la junta de portavoces su intención de enviar este jueves, a la votación de la prórroga del estado de alarma y de los decretos de ayudas socio-económicas, hasta 45 diputados al Congreso -el mismo número de diputados que en el pleno anterior acudió a la cámara en representación de todas las formaciones-, una decisión que incluso Vox reprochó a los populares por considerar que la representación debe ser más limitada, informó 'Cadena Ser'. En el otro extremo, Ciudadanos incluso ha abogado por endurecer el confinamiento parlamentario y optar por intervenciones telemáticas para no perjudicar al personal del Congreso.

De esta manera, desde Génova se rompe el acuerdo que imperaba en el Congreso para enviar una representación limitada a la cámara argumentando que sus parlamentarios podrán mantener entre ellos un escaño libre y por tanto una distancia de un metro de seguridad para evitar la transmisión del virus.