El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, no se atreve a ponerle fecha al ya anunciado ingreso mínimo vital que pretende poner en marcha el gobierno de coalición, pero ha apuntado que no será antes de la segunda quincena del mes de mayo.
"Todavía no tenemos una precisión completa. La mejor previsión que podemos tener en este momento es que llegará al Consejo de Ministros en la segunda quincena de mayo", respondió Escrivá al ser preguntado por la entrada en vigor del ingreso mínimo vital en una entrevista de 'eldiario.es'.
Rebajó así ligeramente le optimismo del vicepresidente de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, quien anunció hace sólo unos días que el gobierno de coalición ya había acordado que se implantara en España "este mismo mes de mayo" con un anuncio del que el propio Escrivá aseguró haberse enterado por la prensa.
Es más, Escrivá restó importancia a la polémica. "Mucho menos de lo que ha podido percibirse desde fuera. Muchísimo menos", aseguró sobre la existencia de discrepancias de pareceres entre los equipos del PSOE y de Unidas Podemos.
No obstante, Escrivá sí ofreció más detalles de la iniciativa. Avanzó que tendrá en cuenta distintos factores para analizar la riqueza neta del hogar como puede ser la posesión o no de activos inmobiliarios y cuáles son las rentas -por ayudas de otras administraciones- que ya se están cobrando para establecer unos umbrales de complemento.
En total, el ingreso mínimo vital podría alcanzar a más de un millón de beneficiarios. "En torno al 50% van a ser hogares con niños y un 10%, quizá algo menos, van a ser hogares monoparentales", apuntó Escrivá.
- El ingreso mínimo vital no se extinguirá por el hecho de encontrar trabajo
- El ingreso mínimo vital será de unos 500 euros y supondría unos 6.000 millones anuales a la arcas públicas
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