La Comisión Europea pronosticó ayer que la economía de la zona euro se contraerá un 7,7%, la inflación casi desaparecerá y la deuda pública y los déficits presupuestarios se incrementarán. El Comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros dijo que Europa está experimentando un shock económico sin precedentes desde la Gran Depresión. Tanto la profundidad de la recesión como la fortaleza de la recuperación serán desiguales en cada país, y estarán condicionadas por la velocidad a la que se puedan levantar los bloqueos, la importancia del turismo y los recursos financieros.
La Comisión estima que la inflación este año se irá reduciendo hasta un 0,2%, para acelerarse hasta un 1,1% en 2021, con una previsión de crecimiento económico del 6,3%. El incremento del gasto público por parte de los gobiernos está siendo el principal sustento para mantener la actividad económica, lo que incrementará los déficits presupuestarios de la zona euro hasta el 8,5% del PIB en 2020 frente al 0,6% del año 2019. Estima que la deuda pública alcanzará a nivel global el 102,7% del PIB desde el 86% de 2019, y en 2021 volverá a situarse por debajo del 100%.
La Comisión Europea está preparando un plan para financiar la recuperación económica que estará listo en las próximas semanas y que será aprobado por los líderes de la UE en junio. Señala que Italia, Grecia, España y Portugal estarán entre los más afectados por los efectos económicos de la pandemia. Luxemburgo, Malta y Austria resistirán mejor el choque.
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