Este viernes se ha conocido el fallecimiento del pintor Juan Genovés, a los 89 años de edad, autor del mítico cuadro 'El abrazo'. Formado en la Escuela de Bellas Artes de Valencia, desde el inicio de su trayectoria profesional fue un pintor inquieto y preocupado tanto por la necesidad de renovar el arte español como por la función del arte y el artista en la sociedad.
El Congreso de los Diputados lo integró en 2015 considerándolo uno de los símbolos pictóricos de la Transición. Antes estaba en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, pero lo cedió a la Cámara Baja a finales de noviembre de ese año.
La pintura, conocida también con el nombre de 'Amnistía', se instaló en el Vestíbulo del edificio del número 36 de la Carrera de San Jerónimo. Allí compartirá espacio con cuadros de los Reyes Juan Carlos y Sofía, los bustos de los presidentes de la Segunda República Manuel Azaña y Niceto Alcalá Zamora, y el de la precursora del voto femenino en España, Clara Campoamor.
El Congreso solicitó formalmente en octubre al Reina Sofía la cesión de esta obra para exponerla de forma "permanente".
La obra, en verdad de 1976, sirvio de homenaje a la memoria de los abogados laboralistas asesinados en la calle Atocha de Madrid en 1977 e inspiró al monumento levantado allí.
En 2016, Genovés declaró que algunos partidos políticos estaban haciendo un uso partidista de su cuadro, quizá su obra más emblemática. "Sí, creo que sí, pero ¿qué le vamos a hacer? También, y sobre todo, la pintura es subjetiva. Ella estaba ahí, muda. Al final ella estará ahí quieta, nos sobrevivirá y su imagen no cambiará. Al ritmo que llevamos estos días a lo mejor se pone de moda y cuando se case la gente puede hacerse debajo del cuadro la foto de novios. Todo es posible", bromeaba el artista valenciano en una entrevista en 2016.
Durante la pasada legislatura fueron los diputados de IU los que hicieron la propuesta de llevar el cuadro a la Cámara Baja, tras permanecer alojado más de 40 años en los almacenes del Reina Sofía.
Considerado uno de los símbolos pictóricos de la Transición, esta pintura recoge la imagen de varias personas de espaldas y de color marrón, sobre un fondo blanco, dándose un abrazo. Es también la base el monumento en memoria de los abogados laboralistas asesinados en Atocha en 1977. El propio Juan Genovés destaca que la idea del mismo radica en la reconciliación de los españoles.
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