Un año de la caída de Carmena y la frustración de la izquierda en las autonómicas y municipales

Este 26 de mayo se cumple justo un año de las elecciones autonómicas y municipales de 2019, que supusieron el final de muchos sueños para la izquierda, que acababa de tener buenos resultados en las elecciones generales de abril, las que luego se tuvieron que repetir en noviembre.

Cuando en regiones como la Comunidad de Madrid parecía que llegaría el cambio de color de su gobierno tras décadas de mandatos del PP, la suma de las derechas, de este partido con Ciudadanos y Vox, impidieron que el socialista Ángel Gabilondo pudiera gobernar la comunidad pese a ser el vencedor de los comicios. Lo mismo les ocurrió a sus compañeros del PSOE en otras autonomías como Castilla y León o Murcia.

Sin embargo hubo una gran protagonista esa noche y fue Manuela Carmena, por lo que significaba su caída. Aunque la entonces alcaldesa de Madrid lograba ganar las elecciones municipales en la capital, su ajustada victoria permitía que el 'popular' José Luis Martínez-Almeida se postulara como nuevo primer edil madrileño con los apoyos de Ciudadanos y Vox.

Carmena había fundado su propio partido tras el fracaso de la plataforma Ahora Madrid, en la que había convivido durante 4 complicados años con Podemos, Izquierda Unida, Equo y otras formaciones anticapitalistas y de asociaciones ciudadanas. Junto a Íñigo Errejón fundó Más Madrid, obteniendo buenos resultados tanto en las elecciones autonómicas como las municipales, pero claramente insuficientes.

Autonómicas madrileñas y otras comunidades

Errejón no pudo ser una fuerza suficiente para apoyar a Gabilondo en el intento de cambio de tendencia del Ejecutivo regional. Isabel Díaz Ayuso, pese a quedar segunda, logró ser la presidenta madrileña. Por su parte, Carmena venció con casi el 31% de los votos y 19 concejales. El PP, con el 24% y 15 concejales se aupó a la Alcaldía gracias a los 11 concejales de Cs y los 4 de Vox.

Los pactos de la izquierda sí triunfaron, sin embargo, en otros lugares destacados. Asturias, La Rioja, Navarra, Comunidad Valenciana, Baleares... fueron algunos ejemplos de donde el acercamiento entre PSOE y Unidas Podemos fueron sellando, junto a otras formaciones, regionalistas o nacionalistas, un pacto que posteriormente, con muchas dificultades, terminó fructificando en Moncloa.

El otro gran pilar de las alcaldías de izquierda en todo el país, Ada Colau en Barcelona, logró de manera paupérrima retener la alcaldía, con el apoyo inesperado del independiente Manuel Valls, que había colaborado con Ciudadanos en la plataforma electoral, y claro está, los socialistas. Por unos pocos votos había ganado los comicios locales ERC con Ernest Maragall al frente.

Sí continuaban otros llamados 'alcaldes del cambio', que habían dado el golpe den 2015, como Kichi en Cádiz, Joan Ribó en Valencia...