Las 10 mejores películas de aventuras de la historia del cine

Después de repasar varios géneros cinematográficos, como los westerns, los musicales, las películas bélicas, las películas de suspense o las comedias llega el turno de hablar del género de aventuras. Las películas de aventuras han sido históricamente la entrada al mágico mundo de las películas para los más pequeños, cada generación tuvo a su héroe de aventuras favorito Errol Flynn fue Robin Hood y el Capitán Blood, Burt Lancaster (con la inestimable ayuda de su amigo Nick Cravat) fue el temible burlón y el halcón y la flecha, Steve McQueen conquistó a medio mundo con un guante de béisbol y Harrison Ford se convirtió en el aventurero definitivo gracias a Han Solo e Indiana Jones.

La guerra de las galaxias (La trilogía original)

Cuando pienso en aventuras pienso en duelos de espada, en princesas, en malos que parecen imbatibles, en figuras legendarias, en lugares remotos, en fantasía, en héroes... Nunca hubo unas películas que reflejaran tan bien todo eso como la trilogía original de 'La Guerra de las Galaxias', este es el sueño que todo niño ha tenido en cualquier rincón del mundo y se lleva contando siglos, verte sumergido en medio de incontables aventuras y escapar de la dura realidad, pero pocas veces con tanta eficacia como la que nos lo contaron aquí, el héroe improbable, el maestro, la profecía, Lucas coge todo el batiburrillo de influencias posibles, de Flash Gordon a 'La Fortaleza Escondida', de 'Centauros del desierto' a 'Metrópolis' y entrega el entretenimiento definitivo.

Lawrence de Arabia (1962)

La verdad es que no tenía muy claro si podía meter esta película aquí, no sé si es más bélica o cualquier otra definición, pero cuando pienso en aventuras no puedo quitarme de la cabeza las de T.E. Lawrence y la dirección de David Lean. Todo es gigante en 'Lawrence de Arabia', su duración, su dirección, su música, sus actores, su belleza... 'Lawrence de Arabia' es una película con dos protagonistas, el que da título a la película, al que dio vida (nunca mejor dicho) Peter O´Toole y el desierto. Este se convierte en el escenario mítico de la película, es el que forja al héroe y tiene un peso propio, como podemos comprobar en su magnífica presentación, cuando David Lean pasa abruptamente de la cerilla encendida de Lawrence al ardiente sol del desierto. Es una pelicula hecha para disfrutar en una pantalla grande y quedar grabada en la memoria como si fuera un gran lienzo.


En busca del arca perdida (1981)

A George Lucas le encantaban los seriales cinematográficos de los años 30 y 40, cosas como 'Flash Gordon','Dick Tracy' o 'Fu manchú', así que a principios de los 70 decidió crear su propio personaje para reverdecer el género, se trataba de Indiana Smith. Desarrolló una historia sobre un arqueólogo que tiene que encontrar el Arca de la Alianza antes de que se hagan con ella los nazis. Al final terminó rodando 'La Guerra de las Galaxias' y la historia se quedó en el tintero. Pero en 1977 Lucas coincidió con su amigo Steven Spielberg de vacaciones en Hawai y éste le dijo que quería rodar una película de James Bond, entonces Lucas se acordó de Indiana Smith y le dijo "yo tengo un personaje mucho mejor", a Spielberg le encantó la idea pero no el apellido, así que el personaje pasó a ser Indiana Jones. Decidieron llamar a Lawrence Kasdan, que estaba trabajando en el guión de 'El Imperio contraataca', y le encargaron que desarrollara la historia. El resultado fue la película de aventuras definitiva.

Para redondearlo todo decidieron que Jones fuera encarnado por el mismísimo Han Solo, un Harrison Ford que pasaría a convertirse en la mayor estrella cinematográfica de los años 80.

Spielberg volvía a dar una lección magistral detrás de las cámaras con una aventura que se apoyaba fuertemente en el sentido del humor y en el desenfreno continuo, con el héroe pasando de una peripecia a otra sin casi tiempo de respirar.

Las dos primeras secuelas están un pelsaño por debajo, pero siguen siendo una verdadera delicia, sobre todo 'La Última Cruzada' en donde se dieron el lujo de poner de padre del aventurero al mismísimo James Bond original, Sean Connery.

El tesoro de Sierra Madre (1948)

Una de las grandes contendientes para ser la mejor película de la carrera de John Huston. El director pone a Humphrey Bogart, Tim Holt y a su padre, Walter Huston, a buscar oro en plena fiebre del ídem.

Huston vuelve a sentirse a gusto mostrando la camaradería entre hombres pero esta vez el oro sacará lo peor de ellos, como dice el personaje de Huston, "sé lo que el oro puede hacerle a las almas de los hombres", algo que no puede ser más cierto en el caso del personaje de Bogart. Nunca antes una estrella de cine se había arriesgado a interpretar a un personaje tan patético y egoísta.

La gran evasión (1963)

Nunca una fuga fue tan entretenida como esta, una película evasiva sobre una evasión que consolidó a Steve McQueen como el tipo más 'cool' del planeta.

John Sturges dirige con pulso y precisión, y el reparto responde con creces. Cuesta creer que hubiera nazis tan tontos y benevolentes como los de la pelicula pero sigue funcionando excepcionalmente. Uno de los mejores ejemplos del cine como evasión.

El señor de los anillos (La trilogía completa)

Primero podríamos hablar de su triunfo como adaptación, difícil se nos hace pensar en otra Tierra Media que no sea la que nos enseña Jackson, del acierto a la hora de elegir el reparto o de su brillante apartado técnico, pero sería quedarnos en la superficie.

El gran logro del director neocelandés fue insuflar de vida esta superproducción cuidada hasta el último detalle. El compromiso del director con la obra de Tolkien fue tal que su adaptación cosiguió alma propia.

Tiene sus fallos pero es un espectáculo gigantesco y asombroso, que entretiene, divierte y emociona. Por una vez, Hollywood nos entregó un producto en el que el contenido estuvo a la altura del continente. Lo malo es que luego nos dieron 'El Hobbitt' y la magia desapareció por completo.

La princesa prometida (1987)

Rob Reiner es uno de los directores más infravalorados de los años 80, ya había hecho una comedia absolutamente genial con 'This is Spinal Tap' y se había adentrado en el género de aventuras con la nostálgica 'Cuenta conmigo', y esta fue su tercera maravilla seguida. Además cuenta con el gran William Goldman (responsable de los guiones de 'Dos hombres y un destino' y 'Todos los hombres del presidente') para adaptar su propia novela, y su reparto es absolutamente espectacular, empezando por su pareja protagonista y llegando hasta el último de los secundarios que aparecen.

Uno de sus grandes aciertos es su forma de jugar con el propio género de aventuras. La película empieza con un un abuelo contándole un cuento a su nieto, a lo que añade mucho el hecho de que el abuelo sea Colombo y el nieto el Kevin Arnold de 'Aquellos maravillosos años'. La película se nos cuenta así, utilizando nuestros prejuicios sobre los cuentos de nuestra infancia, sobre duelos de espada, princesas y bobalicones besos, pero en el que acabamos deseando que todo acabe bien y sean felices y coman perdices (y que el pobre Iñigo Montoya vengue por fin a su padre). Y es que, aunque sepamos perfectamente que, como dice el abuelo, la vida está muy lejos de ser justa, siempre se agradece un cuento en el que los buenos triunfen y los malos reciban su merecido (y si entre medias hay unas cuantas carcajadas y unas cuantas escenas memorables, mucho mejor).

Master and Commander: Al otro lado del mundo (2003)

Una película épica, a la vez que humana; una gran superproducción, en la que aparecen personas reales, en vez de arquetipos. 'Master and Commander' es la historia de un duelo entre dos barcos con la que Peter Weir supera anteriores trabajos como 'Gallipoli' o 'El año que vivimos peligrosamente', aportando un sabor añejo y clásico que le sienta a la perfección. Además Russell Crowe nunca estuvo mejor que en la piel de Jack Aubrey.

El hombre que pudo reinar (1975)

John Huston llevaba más de 20 años planeando llevar a la pantalla el libro de Rudyard Kipling que le había fascinado de niño, 'El hombre que pudo reinar', y estuvo a punto de hacerlo en los 50 con Clark Gable y Humphrey Bogart, luego en los 60 se acercó a Burt Lancaster y Kirk Douglas, finalmente en los 70 se lo pidió a Paul Newman y Robert Redford.

Fue Newman el que le dijo que estos papeles deberían estar interpretados por actores británicos, recomendando específicamente a Sean Connery y Michael Caine.

Los dos aceptaron encantados, sobre todo un Caine que se mostró encantado cuando se enteró de que su papel iba a ser interpretado originalmente por Bogart, su actor favorito. Huston pudo darse el lujo y no defraudó, entregando una maravilla escapista, emocionante y divertida que desborda carisma en sus actores protagonistas.

Tabú (1931)

F.W. Murnau es el mejor director mudo de la historia, el alemán fue el más destacado miembro del expresionismo alemán y cuando Hollywood le fichó fue capaz de hacer volar a las pesadas cámaras de la época en la increíble 'Amanecer' pero después comenzaron los problemas con los estudios, así que harto decidió independizarse y bajo producción propia realizar una película en Tahiti con actores locales, para ello enroló a otro renegado de la industria, el mítico documentalista Robert Flaherty, director de 'Nanuk el esquimal'. Juntos hicieron la historia y comenzaron a rodar, aunque tensiones entre ellos llevaron a que casi la totalidad de la pelicula fuera realizada por Murnau. La película no tiene diálogos pero no puede tener más ritmo, ni contar con unas imágenes más fascinantes, y eso sin hablar de que cuenta con uno de los finales más hermosos de la historia del cine.

Otros 10 títulos imprescindibles:

King Kong (1933)
Robin de los bosques (1938)
Sólo los ángeles tienen alas (1939)
El temible burlón (1952)
Los contrabandistas de Moonfleet (1955)
La fortaleza escondida (1958)
Goldfinger (1964)
Regreso al futuro (1985)
Los goonies (1985)
Spider-Man: Un nuevo universo (2018)