Imputados varios responsables de Podemos por presunta malversación y administración desleal

Malas noticias para Pablo Iglesias en pleno verano. Este martes han quedado formalmente imputados varios responsables de las campañas de Podemos por presuntos delitos de malversación y administración desleal.

Los imputados son:

> Juan Manuel del Olmo, secretario de Comunicación de Podemos y responsable de las campañas
> El tesorero, Daniel de Frutos
> La gerente, Rocío Val
> La responsable del departamento de Compras y Finanzas, Andrea Deodato

La investigación la ha llevado a cabo el titular del Juzgado de Instrucción número 42 de Madrid, Juan José Escalonilla, a partir de una denuncia que presentó José Manuel Calvente, abogado despedido por la formación morada.

El juez Escalonilla ha citado a los 4 implicados el 20 de noviembre en calidad de imputados. Además, ha requerido a Podemos documentación de su contabilidad, así como las tablas de sueldos de sus trabajadores, por si hubiera irregularidades. El magistrado también hará declarar a los proveedores de la campaña electoral de Podemos.

Asimismo, Escalonilla requerirá a la Policía Nacional informes de las sociedades mercantiles en las que figure Juan Carlos Monedero al es tar presuntamente relacionado con el desvío de fondos del partido, asegura 'El Confidencial'.

Recientemente, el Tribunal de Cuentas detectó facturas no relacionadas con la campaña electoral y que parte del dinero pudo salir a México. El juez sospecha que habría irregularidades en la contabilidad que presentó el ex abogado Calvente, quien fue despedido en diciembre de 2019 tras detectar algunas operaciones. Tras su despido, llevó el tema a la Guardia Civil, cuyo informe forma parte de la causa judicial ahora.

Calvente denunció una presunta manipulación en el concurso para reformar la nueva sede de Podemos, así como el uso de fondos de la Caja de Solidaridad del partido para financiar proyectos fantasma de los dirigentes de la formación sin ningún tipo de control, explicó 'El Confidencial'. Además Calvente detectó la externalización de la campaña de las generales de abril de 2019, cuando se contrató a una empresa vinculada al chavismo recién llegada a España, Neurona Consulting, y otra firma portuguesa de su entorno, ABD Europa LDA.