Pablo Motos entrevistó el martes al presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, y su intervención no puso ser más explosiva. El político reconoció que siempre admiró al ahora rey emérito, don Juan Carlos, pero que actualmente le ha decepcionado mucho.
Quiso hablar del tema de la corrupción y comenzó fuerte, mencionando a "alguien que está muy lejos de aquí". Motos se temió que hablaba del ex monarca y le preguntó por él.
Revilla se mostró indignado con que haya un manifiesto que lo apoya, preguntándose si todos los que lo han firmado harían lo mismo que él, cobrar comisiones sin deber hacerlo y luego escapar de España sin rendir cuentas.
El presidente de Cantabria dijo que siempre admiró mucho a Juan Carlos I y que por eso su decepción "es mucho mayor que la de cualquiera". La única solución para Revilla, es que el rey emérito vuelva a España, reconozca lo que ha hecho y dé la cara ante la Justicia.
También reconoció que ahora se arrepiente de haberle dado una portada un libro suyo escrito hace años, aunque admite que su figura fue clave para la transición democrática.
Cabreo con Sánchez
Además, Revilla reveló los motivos por los que está "cabreado" con Pedro Sánchez, a quien no apoyó en la investidura con el único diputado de su partido, el PRC.
El mandatario cántabro, que gobierna en la región gracias a los apoyos del PSOE, reconoció que tiene un motivo "doloroso" por el cual está enfadado con el presidente del Gobierno. Considera que, tras muchas reuniones con él, todas por pantalla menos una presencial, le hizo "un feo" a su comunidad. "Es lo que me han dicho mis asesores jurídicos".
Y criticó el agravio comparativo que sufre con otras comunidades, como el País Vasco. "No es un gesto amistoso", dijo Revilla.
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