Donald Trump ha dejado esta pasada noche el hospital y pidió a la gente que "no tema" a la covid-19, poniéndose de ejemplo de superación.
El mandatario ha solicitado el alta voluntaria, en contra del criterio de sus médicos, puesto que no ha superado la enfermedad aún y puede contagiar a otras personas. Asegura que se siente mejor "que hace 20 años".
El presidente de EEUU regresó a la Casa Blanca pese a que los médicos advierten de que no está fuera de peligro y se pone en duda que vaya a guardar una correcta cuarentena para no contagir a otras personas. Lo primero que hizo es quitarse la mascarilla, lo que muchos consideran una declaracion de intenciones.
Trump salió caminando del hospital tras estar ingresado 3 días y prometió reanudar "pronto" su campaña para las elecciones del 3 de noviembre, aunque su médico dijo que aún no está "completamente fuera de peligro". De hecho, a Trump se le pudo ver alguna dificultad para respirar cuando se quitó la mascarilla y entraba en la Casa Blanca.
Paciente de riesgo
El político y empresario, de 74 años, es considerado un paciente de riesgo por su mala salud, en concreto por su obesidad, aunque el cóctel experimental de medicamentos empleados para mejorar sus síntomas han surtido efecto y Trump habría conseguido evitar los peores efectos de la covid: fiebres altas, dificultad respiratoria, neumonía... Se desconoce qué otros síntomas ha tenido y si sigue con algunos de ellos, como por ejemplo la fatiga.
Entre los planes cercanos más que tiene el presidente es el segundo debate electoral del 15 de octubre, que no se descarta si Trump está totalmente recuperado y ya no da positivo en los tests. Su rival, Joe Biden, ha mantenido una tregua estos días, pero seguramente base su discurso próximamente en las imprudencias del presidente a la hora de afrontar la pandemia.
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