Crítica de la obra 'Galdós: Sombra y realidad': Galdós frente a sus mujeres

Ignacio del Moral y Verónica Fernández han puesto también su granito de arena en este año conmemorativo de la muerte de don Benito Pérez Galdós (1843–1920), aportando un texto, ‘Galdós: sombra y realidad’, que ha adaptado y dirigido Pilar G. Almansa y que puede verse hasta el 13 de diciembre próximo en la Sala Principal del Teatro Español de Madrid.

Novelista más que prolífico, dramaturgo y articulista, Galdós es autor –entre muchos otros títulos-, de Fortunata y Jacinta (1887), una novela en la que describió como nadie el ambiente de pobreza física y moral de aquella España de finales del XIX, o de sus emblemáticos Episodios Nacionales, el mejor fresco de la España que va desde 1807 hasta la Restauración. El montaje, sin embargo, sitúa al escritor canario y madrileño en los años 20 del siglo XX, poco antes de morir, época convulsa en la que florecieron corrientes progresistas tanto en lo político como en lo social. Son años en los que empieza a surgir con fuerza una primera corriente feminista que busca la igualdad entre hombres y mujeres, que pide el voto para la mujer en nuestro país, o época en la que comienza también a surgir el concepto de amor libre. Momentos de los que parten Del Moral y Fernández para situar a Galdós rememorando sus relaciones amorosas con cinco mujeres que significaron mucho en su vida personal.

En efecto, el montaje presenta a Galdós (Jesús Noguero), ya ciego, pobre, y buscando obsesivamente a su perro lazarillo mientras, poco a poco, y entre sueños y recuerdos, van apareciendo ante el escritor desde Sisita (María Ramos), una prima canaria que fue su primer amor, hasta Teodosia Gandarias (Carmen Conesa), el último de ellos; pasando por Concha Ruth Morell (Marta Aledo), o Lorenza Cobián (Ainhoa Santamaría), la madre de la única hija del escritor, además de Doña Emilia Pardo Bazán (Amparo Fernández).

Algunos de los personajes femeninos galdosianos cobran vida también ante don Benito como es el caso de Tristana (encarnada por Diana Palazón), Fortunata, Marianela o Doña Perfecta. Ante unas y otras,personajes históricos y personajes de ficción, quedan expuestos sin melindres ni hipocresías los amores, obsesiones, deseos y contradicciones del escritor canario de nacimiento y madrileño de adopción.

Jesús Noguero, sobrio y convincente Galdós, permanece en escena los 90 minutos de duración del montaje, mientras que Carmen Conesa (Teodosia), una actriz y músico siempre segura, marca los tiempos dramáticos y musicales de la historia que se narra. El resto del elenco cumple también con solvencia y eficacia en sus papeles respectivos.

A la propuesta, sin embargo y a nuestro juicio, le falta solidez y nervio porque los personajes van sucediéndose ante el espectador sin que lleguen a calarle en su fibra emocional. Y eso que todos los aspectos que envuelven al espectáculo, considerados aisladamente, son incluso notables. Desde la interpretación hasta la escenografía de José Luis Raymond; desde la iluminación de Carlos Torrijos, el vestuario de Vanessa Actif, la música de Mariano Marín o el movimiento escénico ideado por Amaya Galeote.

‘Galdós: Sombra y realidad’

Autores: Ignacio del Moral y Verónica Fernández

Adaptación y dirección: Pilar G. Almansa

Intérpretes: Marta Aledo, Carmen Conesa, Amparo Fernández, Jesús Noguero, Diana Palazón, María Ramos y Ainhoa Santamaría

Piano: Carmen Conesa

Espacio escénico: José Luis Raymond (AAPEE)

Diseño de iluminación: Carlos Torrijos (AAI)

Diseño de vestuario: Vanessa Actif

Composición música original: Mariano Marín

Movimiento escénico: Amaya Galeote

Ayudante de dirección: Manu Báñez

Ayudante de escenografía: Laura Ordas

Ayudante de vestuario: Mónica Tejeiro

Una producción del Teatro Español

Teatro Español, Madrid

Hasta el 13 de diciembre de 2020