Los gobiernos de la Unión Europea activarán su plan para poner en marcha el fondo europeo de recuperación sin Hungría y Polonia si los ejecutivos de estos dos países no dan "señales claras" de su voluntad para levantar el veto al paquete presupuestario en las próximas horas y, como muy tarde, este martes.
De hecho, estos 2 países ya han adelantado que su respuesta seguirá siendo el veto, por lo que se quedarán sin fondos ni ayudas en próximas ocasiones.
Los alcaldes de las respectivas capitales, Budapest y Varsovia, piden ayudas directas desmarcándose así de los gobiernos de sus países y apostando por el compromiso con la UE.
Hungría y Polonia mantienen ese veto como postura ideológica y política después de que la UE ligara la recepción de los fondos a los compromisos de los países miembros al respeto a los derechos humanos y las máximas garantías democráticas, ante los ejercicios autoritarios de estos 2 países en los últimos años.
Ambos están gobernados por partidos ultranacionalistas y ultraconservadores y no se comprometen a seguir la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea.
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