www.diariocritico.com

Salvador... a Cataluña, con amor

martes 26 de enero de 2021, 10:15h

Hoy cambiamos de ministro de Sanidad, seguro que no les digo nada nuevo y seguramente estén tan sorprendidos como yo o quién sabe, puede que ya no les sorprenda nada...

Increíble pero cierto, en el peor momento de la pandemia, cuando estamos batiendo récords diarios de contagios, cuando estamos en la cresta de la tercera ola, cuando es el momento más polémico de las vacunas, cuando aparecen nuevas cepas, cuando la incidencia acumulada está en máximos, cuando la presión hospitalaria amenaza con colapsar el sistema sanitario, justo ahora, en este preciso momento, Illa se va.

Ya sabemos que aquí pase lo que pase, nunca pasa nada y por supuesto no dimite nadie, salvo, eso sí, que sea para presentarse a unas elecciones. El presidente, nuestro presidente, el mismo que decía que tenemos “el mejor Ministro de Sanidad de la historia” ha pensado que ahora el mejor ministro va ser el mejor candidato, porque él lo vale. ¿Qué necesidad hay de primarias teniendo la posibilidad de nombrar a dedo? Mucho más práctico ¡dónde va a parar!

Y se va así, sin más, sin comparecer y sin dar explicaciones. No sé si recordarán que desde Noviembre estamos en un estado de alarma que se prorrogó hasta mayo asegurándonos que se iba a comparecer mensualmente en el Congreso, ya saben, esas cosas de la transparencia que tan bien queda decir y tan difícil parece cumplir. Pues bien, desde finales de noviembre estamos sin explicaciones y sin ellas nos vamos a quedar, habrán pensado que “el que venga detrás que lo haga, no vaya a ser y le pongamos en un aprieto al candidato y no salga bien la jugada de las elecciones catalanas”, que son mucho más importantes que la situación sanitaria.

Lo que sí le gustan a Illa son las ruedas de prensa para anunciarnos “el principio del fin”, para hablarnos de “resiliencia”, “saldremos mejores”, “doblegar la curva”, “persistir” y también para contarnos que“venceremos a la tercera ola”, sin pensar que si estamos en una tercera es porque no hemos sido capaces de acabar ni con la primera ni con la segunda, pero claro, es por nuestra culpa porque somos unos irresponsables y no nos “autoconfinamos”. Irresponsables hay, descerebrados también, pero igual falta algo de gestión. Puede que esté bien hacer algo de autocrítica porque por mucho que nos diga que “las medidas adoptadas y que el estado de alarma vigente funcionan” no lo tengo yo tan claro viendo como estamos.

Parece que Salvador, El Salvador va a pasar de salvar vidas, a salvar unas elecciones, aunque no sabemos a costa de qué. Esperemos que no sea a costa de colapsar el sistema sanitario con más contagios y hospitalizaciones, ni de más vidas que se queden por el camino por ir a votar. Supongo que esperan que El Salvador se transforme en Cupido y llegue al corazón de los catalanes. Ojalá y después del 14F no volvamos a un después del 8M porque si no, los corazones tocados serán los de todos.

Esther Ruiz Moya

Periodista

Esther Ruiz Moya es comunicadora, creativa, escritora y motivadora. Premio Círculo Rojo 2021. Colaboradora en medios en España y Estados Unidos. Autora del libro 'Cuando esto pase...', sobre la pandemia y el confinamiento. Autora del podcast 'A Contraluz', disponible en Spotify

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios