El piloto español Fernando Alonso fue atropellado ayer jueves cerca de su casa de Lugano, en Suiza. De hecho fue en esta localidad, concretamente en una rotonda, donde sucedieron los hechos mientras él montaba en bicicleta.
Alonso entrenaba en bicicleta en plena pretemporada de la Fórmula 1, competición a la que volvía en este 2021 y que ahora está algo en duda por los plazos de recuperación que pueda necesitar tras presentar algunas lesiones.
Lo más importante que se supo es que no fue un accidente grave y que sus lesiones serían menores, aunque podrían requerir alguna operación. Al parecer, las molestias mayores serían en la mandíbula y algunas fuentes hablarían de una clavícula.
Su equipo de F1, Alpine, de Renault, hizo un comunicado en el que tranquilizaban a los segudores del asturiano: "Está consciente, se encuentra bien y está esperando a nuevas pruebas que se le realizarán mañana por la mañana. No se emitirán más comunicados hasta ese momento".
Daños en boca
Según informa el diario 'Marca', el principal golpe habría sido en el rostro, sin afecciones en brazos o piernas, pero con daños en algún diente. Al parecer cayó de boca.
Alonso llevaba correctamente el casco y la protección le salvó de daños mayores.
En todo caso, las primeras conclusiones médicas es que Alonso presenta buen pronóstico y que podría en unos días reincorporarse a los entrenamientos para iniciar su temporada de F1, que será el 28 de marzo en Bahréin.
Sin embargo, los primeros test de carrera serán a mediados de ese mes y el piloto andaría justo con los plazos en el caso de necesitar recuperación.
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