Era el peor momento para mostrar que se acercaba a un fin de ciclo. Ya confirmado. En pleno partido de vuelta de las semifinales de la Champions, y aunque bastaba con un empate con goles para al menos forzar la prórroga, el Real Madrid fue incapaz de hacer frente a un atlético y joven Chelsea (2-0).
Una eliminación que duele, porque no está el Madrid acostumbrado a caer en semifinales, y más con Zidane, que siempre que llegó a esa ronda, la superó, pero la plantilla blanca no daba para más. Ya hubo señales de ellos en el partido de ida (1-1), pero la esperanza seguía viva gracias al resultado moderadamente optimista, pero el Chelsea pudo hacer más tantos en Madrid.
En Londres fue peor. Sólo Courtois y algún golpe de suerte evitó una goleada de un conjunto superior en casi todo, sobre todo en la parcela física. Modric, Kroos y compañía eligieron el peor momento para demostrar que no tienen más gasolina para ser competitivos en este primer nivel europeo, y sólo queda ya el consuelo de luchar por la Liga, en los 4 partidos que faltan para acabar el campeonato.
Pese a que la temporada ha tenido buenos momento, definitivamente se echó de menos a los Achraf, Reguilón, Odegaard, Jovic, Mayoral... muchos jugadores jóvenes que no contaron con la confianza de Zidane. Ayer, la apuesta del francés por jugadores que salían de lesión, como Hazard, Ramos o Mendy, fue un grave error. Los 3 estuvieron fuera del partido, y el equipo lo acusó en conjunto.
Sus peores días
Y como si esto no fuera ya de por sí mucho, Casemiro eligió el peor día para dar su peor partido en mucho tiempo. El de los milagros en el centro del campo que siempre sostenía al Madrid. Zidane incluso le cambió en el tramo final del partido, aunque Kroos y Modric no estuvieron mucho mejor.
Además, el agujero en el lateral derecho fue un lastre, y cuando mejor estaba Militao de central, le forzó a ser un semi-lateral derecho, porque Vinicius como carrilero no pudo rendir en ese puesto. La defenas hizo agua continuamente ante las ofensivas brutales del Chelsea, que pudo irse al descanso con al menos 2 o 3 goles. Pero los milagros varios hicieron que el Madrid siguiera vivo hasta el tramo final, aunque impotente a la hora de intentar marcar. Benzema apenas ni la olió, y el resto del equipo no estuvo a la altura.
Centrarse en la Liga tras el disgusto y planear una nueva temporada con poco dinero para fichajes y un relevo generacional son los próximos objetivos blancos. Zidane seguirá. Veremos cómo encuentra la fórmula.
Si (
No(
