El proyecto de concienciación es pionero en el territorio valenciano y está orientado a fomentar la economía circular
Las diversas acciones informativas y divulgativas que llevan a cabo las educadoras y los educadores ambientales de Castelló han supuesto el desarrollo de un proyecto pionero que sitúa a la ciudad entre los referentes en esta materia.
Y es que más de 1.000 ciudadanas y ciudadanos han ayudado a dibujar el mapa de situación de la ciudad por lo que respecte al reciclaje.
Esta información ayudará a conocer la situación actual y a definir las políticas que llevará a cabo la Concejalía de Reciclaje y Gestión de Residuos para incrementar la concienciación ciudadana y para facilitar el reciclaje en los hogares, los comercios, la hostelería y las asociaciones de Castelló.
Además, informa sobre la importancia de fomentar la economía circular, a través del aprovechamiento de los residuos. “Las y los profesionales de la educación ambiental son fundamentales para mantener un contacto estrecho con la ciudadanía, recoger sugerencias para mejorar nuestras acciones y los servicios de reciclaje y evaluar la efectividad de todas las iniciativas que se desarrollan desde el ayuntamiento de Castelló”. Así lo ha manifestado el concejal de Reciclaje y Gestión de Residuos, Ignasi Garcia, quien ha acompañado al equipo de educación ambiental en las jornadas sobre economía circular organizadas por Radio Castellón, un acto al que ha asistido también la consellera Calidad Ambiental y Cambio Climático, Mireia Mollà.
La representante de las educadoras y educadores de Castelló, Mónica Fernández, ha destacado en su intervención la necesidad de avanzar hacia la economía circular en la que todos los residuos se puedan convertir en recursos. Ha puesto también de relieve los avances en cuanto a la recogida selectiva en Castelló y ha explicado las posibilidades que los residuos urbanos tienen para la realización de compuestos (a partir de los restos orgánicos) o de combustibles sólidos (elaborados con residuos no peligrosos como plástico, cartón y metales).
La ciudad de Castelló ha vivido una evolución significativa respecto al uso del contenedor marrón (de restos orgánicos), gracias, en parte, a la tarea de educación ambiental. El resto de fracciones de reciclaje también se han incrementado en la ciudad en el último año y el Ayuntamiento ha apostado por la creación de islas de reciclaje. La economía circular es un reto común de las administraciones y de la ciudadanía, como ha explicado Fernández.
Los primeros pasos son reducir el consumo de productos con envases o componentes contaminantes y potenciar la reutilización y la reparación. En menor porcentaje, este marco normativo sitúa el reciclaje y la creación de productos derivados de residuos y, en la última fase, queda la eliminación de los residuos.
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