El Gobierno, los sindicatos y la patronal confían en dar luz verde al acuerdo sobre las pensiones el próximo lunes, cuando se celebrará una nueva reunión de la mesa de diálogo social. Según se ha sabido este miércoles, el Ejecutivo ha aceptado dos de las principales reclamaciones de los sindicatos: la inclusión de la revalorización automática de las pensiones en base al IPC y la derogación del Factor de Sostenibilidad, lo que supone un importante avance hacia el pacto.
El líder de UGT, Pepe Álvarez, ha manifestado que espra que "la semana que viene se acabe cerrando el acuerdo; solo falta que nos sentemos y colectivamente le demos validez a un acuerdo que llevamos trabajando desde hace meses y que está listo a falta de temas menores".
Según ha explicado, el pacto de pensiones "va en línea con el Acuerdo Social de 2011 y en contra de la reforma de las pensiones del gobierno del PP de 2013, ya que supone la derogación de esta reforma, con la inclusión de la revalorización automática de las pensiones en base al IPC y la derogación del Factor de Sostenibilidad".
El acuerdo también recoge las bajas por enfermedad para las personas de más edad o la disminución de los coeficientes reductores para los jubilados anticipados con largas carreras de cotización. "Queremos un sistema de pensiones contributivo, redistributivo y que tenga relación con los años cotizados por las personas", ha remarcado el líder sindical.
En la misma línea, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha calificado de "bueno el acuerdo que va a suponer la derogación de los aspectos de la reforma de 2013 que veníamos reclamando, la revalorización de las pensiones y la eliminación del factor de sostenibilidad".
Sordo ha señalado que se va a aprobar un paquete de medidas para mejorar la estructura de ingresos de la Seguridad Social, que podría suponer un 2% del PIB, que se tendrán que desarrollar en los próximos años para reforzar la estructura de ingresos y dar solidez al futuro.
"El acuerdo será positivo para los pensionistas de ahora pero también para las personas que nos vamos a jubilar, que seremos más y que cobraremos pensiones durante más años y de mayor cuantía y eso supone un incremento de gasto de 3 a 4 puntos del PIB. El incremento en un 40% de pensionistas supondrá recortar las pensiones o mejorar la estructura de los ingresos", ha afirmado.
Según ha aseverado, "no se ampliará la edad de jubilación que va a estar como hasta ahora, de 65 a 67 años", mientras que se ha acordado "mejorar los coeficientes de reducción porque en España no funcionan los incentivos para que las personas continúen en sus puestos de trabajo y las personas se jubilan a la edad que les corresponde por ley".
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