EEUU aplaude la liberación de dos rehenes de las FARC

El Gobierno de Estados Unidos dijo este jueves que "da la bienvenida" a los buenos oficios del presidente venezolano, Hugo Chávez, para lograr la liberación de dos mujeres que estaban en poder de la guerrilla colombiana de las FARC desde hace seis años.

"Creo que debemos dar la bienvenida a cualquier persona, incluyendo el presidente Chávez y a cualquiera" que pueda ayudar para la puesta en libertad de los rehenes en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), dijo a la prensa Tom Casey, uno de los portavoces del Departamento de Estado.

"Damos la bienvenida a los buenos oficios de cualquier individuo que pueda ayudar a asegurar (la liberación de rehenes) en cooperación con el Gobierno colombiano", enfatizó Casey.

Sin embargo, reiteró el llamamiento de Estados Unidos para que las FARC, un grupo que considera terrorista, libere a todas las personas en su poder, incluyendo a tres estadounidenses y a todos los colombianos secuestrados.

Chávez por su parte, pidió este viernes a los gobiernos del continente americano y del mundo que reconozcan a las FARC y al ELN como grupos insurgentes y los saquen de la lista de grupos terroristas.

"Les pido que comencemos reconociendo a las FARC y al ELN como fuerzas insurgentes de Colombia y no como grupos terroristas. Lo pido a los gobiernos de este continente y a los gobiernos del mundo", dijo Chávez antes de presentar su mensaje anual ante la Asamblea Nacional (AN).

Consideró que la presencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la lista de grupos terroristas obedece a "la presión de Estados Unidos".

Marc Gonzalves, Keith Stansell y Thomas Howes, tres contratistas estadounidenses del Pentágono, permanecen en manos de las FARC desde febrero de 2003.

Los tres fueron tomados como rehenes después de que la avioneta estadounidense en la que se transportaban, dentro de una misión del llamado Plan Colombia, se accidentó según la versión oficial o fue derribada en las selvas del departamento de Caquetá, dicen los rebeldes.

Casey también hizo hincapié en el liderazgo del presidente Álvaro Uribe en sus esfuerzos por lograr la libertad de los rehenes y reiteró que EE.UU. apoya a otros individuos que tengan un papel positivo y cooperen con el Gobierno colombiano en ese objetivo.

Por otra parte, Casey no quiso "especular" sobre la afinidad entre las FARC y el presidente Chávez e insistió en que se trata de "un buen día para estas dos personas" que hoy lograron su libertad.

La guerrilla de las FARC liberó este jueves en un caserío indígena del departamento colombiano del Guaviare a Clara Rojas y Consuelo González de Perdomo, secuestradas desde hace seis años, y quienes fueron llevadas a Venezuela para reunirse con sus familiares.

El Gobierno de Washington mantiene una política de no negociar con terroristas.
En ese sentido, Casey enfatizó que el Gobierno de Estados Unidos no ha tenido contacto directo con Chávez sobre el canje humanitario y consideró que "la actitud prudente es trabajar con el gobierno del país involucrado, que es Colombia, y eso es lo que vamos a hacer".

Chávez, y la senadora colombiana de oposición Piedad Córdoba, fueron mediadores oficiales del Gobierno de Bogotá entre agosto y noviembre pasados cuando, debido a desacuerdos, el presidente Uribe los cesó de esas funciones.

Preguntado sobre si la política de Estados Unidos hacia Chávez es un obstáculo para resolver la crisis, Casey respondió que su país "continuará haciendo todo lo que pueda por lograr la liberación, sanos y salvos, de los ciudadanos estadounidenses, cautivos de esta organización terrorista ilegal".

Casey dejó claro, una y otra vez, que no le corresponde a Estados Unidos negociar con Chávez para facilitar la liberación de los rehenes porque es el Gobierno de Colombia y el presidente Uribe "los que en última instancia son responsables del manejo de cualquier proceso" para el canje humanitario.

Presionado varias veces sobre la influencia de Chávez para que la guerrilla soltase a los rehenes, Casey mantuvo la línea de que "trabajamos con el gobierno de Colombia. Estos son ciudadanos estadounidenses que fueron capturados en Colombia por una organización terrorista colombiana".

"Si el gobierno de Colombia cree que hay otros que pueden ayudarnos en ese esfuerzo, tengan la seguridad de que nosotros aceptaremos esa oportunidad", puntualizó el portavoz.

Los legisladores demócratas Bill Delahunt, Gregory Meeks y James McGovern, que han seguido de cerca esta crisis y han recibido en múltiples ocasiones a la senadora Córdoba, no han hecho comentarios sobre la noticia de este jueves.

Sin embargo, en entrevista telefónica con Efe desde Connecticut, Jo Rossano, madre de Gonzalves, se manifestó "encantada con la noticia".

"Me puse a llorar mares porque eso me da esperanza de volver a ver a mi hijo. Me parece que esto contribuirá a la paz y armonía en Colombia y que todos los rehenes serán liberados", dijo Rossano, con la voz entrecortada.

Preguntada sobre cuál debe ser la respuesta del presidente colombiano, Álvaro Uribe, Rossano no dudo en responder que "espero que él continúe tratando de conseguir la liberación de todos los rehenes, no sólo los rehenes políticos sino también a aquellos que nadie menciona".