Un Sheriff moldavo, un portero griego y un entrenador italiano desubicado: el Madrid pierde en Champions (1-2)

El modesto Sheriff Tiraspol moldavo asaltó el Bernabéu ganando por 1-2 de manera sorprendente en Champions. Los visitantes ya se adelantaron por sorpresa en el minuto 25, y aunque llegó el empate en la segunda parte, de penalti, el Real Madrid fue incapaz de culminar la remontada.

De hecho, terminó llevándose un segundo tanto debido al caos táctico al que llevaron los cambios de un Carlo Ancelotti que falla por segunda vez consecutiva con sus decisiones desde el banquillo. Camavinga y Valverde acabaron de laterales sin motivos y otras modificaciones de pizarra fueron muy desacertadas.

Benzema estuvo más gris que en otras ocasiones y sólo vio puerta desde los 11 metros, y Vinicius jugó de manera atropellada y recordando al que fue en las anteriores temporadas. Hazard, de nuevo desaparecido en combate. Mientras, el héroe del partido fue el meta griego Georgios Athanasiadis, que prácticamente se lo paró todo en su área.

Explicaciones de Ancelotti

Ancelotti, en su comparecencia tras el partido, dijo: "Estamos tristes más que preocupados porque hemos tenido la oportunidad de ganar tres puntos. El equipo ha cumplido, ha jugado con mucha intensidad y compromiso y los pequeños detalles nos han costado el partido. Hemos tenido muchas oportunidades, se podría haber sido más fino en los últimos 30 metros. Es difícil explicar esta derrota por el partido jugado".

"Puede ser una buena lección para el futuro. Ahora comentamos una derrota cuando el equipo no lo ha merecido por lo que ha hecho. El Sheriff ha defendido bien, muy cerrado atrás. Nosotros hemos combinado bien y roto muchas veces la línea atrás y hecho muchos centros. Lo que no hemos hecho bien son los pequeños detalles. El partido lo hemos perdido porque hemos tenido un poco de mala suerte", explicó.

"Hoy hemos jugado con 4-4-2. Teníamos en la izquierda por fuera a Vinicius Jr., en la derecha se cambiaban a veces Valverde, Hazard, Nacho… No hemos jugado 4-3-3 porque habitualmente con Hazard jugamos así. Camavinga está acostumbrado a jugar en la izquierda porque ha jugado cuando era más joven muchas veces ahí. Teníamos el control total del partido y Valverde ha empujado mucho como lateral. Después he hecho cambios en el medio para meter más frescura”, justificó sobre sus decisiones tácticas.