Es una de las noticias del día: el Gobierno está preparando una nueva regulación de los ERTE y conlleva muchas novedades para los trabajadores afectados por la falta de actividad económica en su sector laboral.
Según desvela RTVE, patronal y sindicatos están negociando con el Ejecutivo unos nuevos ERTE de cara a la reforma laboral que hay que acometer tras derogar próximamente la de 2012, elaborada por el PP.
Los ERTE se podrán plantear bajo 3 supuestos: fuerza mayor, reciclaje de trabajadores y reconversión de sectores económicos.
Además, los ERTE pasarán a llamarse técnicamente 'Mecanismo RED de Flexibilidad y Estabilización del empleo' y plantea que los trabajadores puedan reciclarse y ser trasladados a otras empresas o sectores.
Cuando un trabajador sea trasladado, la empresa pasará el 50% de la cuantía del despido del trabajador al Fondo de Garantía Salarial (FOGASA). Será una especie de 'mochila austriaca'.
Con esto el trabajador no pierde la indemnización pero la empresa de origen puede permitirse perder el trabajador y que otra empresa nueva le contrate al trabajador sin asumir los costes del despido ni la antigüedad del contrato. Además, estas empresas que contraten se llevarán desgravaciones en la Seguridad Social. El objetivo es que haya movilidad laboral antes que un despido y que ese trabajador se quede fuera del mundo laboral.
Permiso del Gobierno
El ERTE por fuerza mayor seguirá casi como hasta ahora: las empresas dejarán de pagar a sus empleados si no puedan continuar con su actividad por situaciones excepcionales como son las catástrofes naturales, siendo el caso más reciente la pandemia de coronavirus. Tanto empresarios como sindicatos asumirán los fondos necesarios para financiar sus pagos.
Los 3 tipos de ERTE tendrán que ser autorizados previamente por parte del Gobierno, no por un juez. Para conseguir el 'ok' del Ejecutivo, las empresas y sectores afectados tendrán que justificar sus pérdidas y presentar un plan de recolocación, formación y atención a los trabajadores afectados.
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