Madrid refuerza su preparación ante inclemencias invernales tras Filomena

La Península experimentará desde este domingo un notable desplome de las temperaturas asociado a la primera DANA invernal. Si bien se sentirá más en la zona pirenaica, así como en Catalunya, Comunidad Valencia e Islas Baleares, la Comunidad de Madrid también sufrirá sus consecuencias. Se esperan precipitaciones para los próximos días, en los que los termómetros podrían no superar los 7 grados de máxima, y no se descartan nevadas en la Sierra. Un primer toque de atención meteorológico que coincide con el llamamiento de la Agencia de Seguridad y Emergencias de Madrid (ASEM 112) a los municipios para que tomen medidas preventivas ante las inclemencias propias del invierno e indiquen a sus vecinos las pautas a seguir.

"Resulta vital que las administraciones locales se impliquen, pudiendo realizar una importante labor en la promoción de la autoprotección", afirman desde ASEM 112, que ha remitido a los ayuntamientos una guía con recomendaciones para la ciudadanía ante nevadas, hielos y temperaturas mínimas. Al mismo tiempo, la Agencia recomienda a los consistorios la elaboración de un Plan de Acción Municipal ante emergencias por inclemencias invernales. Ya han validado el suyo Alcorcón, Boadilla del Monte, Torrelodones, Galapagar, Guadarrama, Soto del Real y El Molar y se encuentran en proceso de revisión los de Alpedrete, Colmenarejo, Parla, Valdemorillo, Paracuellos del Jarama y Tres Cantos. Por tanto, la petición se dirige a las 166 localidades que aún no cuentan con él.

No se trata de un documento obligatorio, en ningún caso, pero desde el Gobierno regional inciden en sus beneficios: "Ayuda a conocer mejor los riesgos a los que pueden tener que enfrentarse, posibilita disponer de un catálogo de medios y recursos propios para responder a las emergencias, estableciendo una organización que los coordine, y facilita la anticipación y la concienciación de la ciudadanía". Por su parte, la Agencia de Seguridad y Emergencias de Madrid ultima la actualización del Plan de Protección Civil ante Inclemencias Invernales, cuya nueva versión aprobará en diciembre.

El antiguo Plan se completará con el aprendizaje adquirido tras el devastador paso de la borrasca Filomena el pasado mes de enero. "Hemos analizado los puntos fuertes y también las áreas de mejora detectadas por las entidades que intervinieron en aquel evento", exponen. Las conclusiones extraídas han motivado la definición de los enclaves críticos sobre los que deben priorizar las labores de respuesta, así como un refuerzo del remanente de sal. Así, ASEM 112 se ha aprovisionado con 50 toneladas que emplearían, en primer lugar, "para el despeje de los accesos a las propias instalaciones y a otros puntos prioritarios de los servicios esenciales".

Pese a la DANA que ha llegado a España este fin de semana, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) pronostica un invierno "más cálido que la media y sin anomalías notables en cuanto a precipitación". No obstante, esto no impide que puedan darse eventos adversos puntuales, ya que las predicciones a largo plazo presentan una elevada incertidumbre. En todo caso, aseguran que "es poco probable" que se repita un episodio similar al de Filomena, que sumió en el caos circulatorio a la Comunidad de Madrid durante una semana y provocó cuantiosos daños materiales y naturales, la mayor parte localizados en la capital. "Fenómenos de esa intensidad suceden cada 100 años", tranquilizan, pero cualquier precaución es poca tras la traumática experiencia reciente.

Los planes de Boadilla y Guadarrama

La Agencia de Seguridad y Emergencias de Madrid permanece "en permanente posición de alerta", la Delegación del Gobierno hace lo propio y los municipios que ya han redactado su Plan de Acción Municipal ante Inclemencias Invernales podrán afrontar jornadas de nieve, hielo y frío extremo con mayor garantía. Es el caso de Boadilla del Monte, cuyo Plan se centra en "asegurar aspectos como la vialidad de la red de carreteras y calles urbanas e interurbanas, los servicios esenciales, la atención a los ocupantes de los vehículos atrapados, la coordinación para evacuaciones de zonas que estén o pudieran quedar aisladas por la nieve y la atención de los ciudadanos afectados y el fomento de la autoprotección ciudadana", según trasladan desde el Ayuntamiento que dirige Javier Úbeda.

En el documento se precisan los niveles de alerta -blanco de preemergencia, amarillo y naranja- con las diferentes situaciones a resolver por parte de cada grupo, desde personal de intervención hasta sanitario, logístico, de apoyo técnico y de asistencia social, todos ellos presididos por el propio regidor. La Alcaldía ha diseñado un dispositivo que consta de 160 efectivos entre Policía Local, Protección Civil, Emergencias y servicios municipales de limpieza, jardines y mantenimiento, a los que se suma la Guardia Civil. Además, pueden hacer uso de hasta 10 vehículos diferentes entre quitanives, retroescavadoras y rodillos barredores, cinco esparcidoras de sal adicionales a las que incorporan algunos de estos medios y 20 arcones de sal para instalar en edificios de interés municipal, urbanizaciones y colegios.

Tras la experiencia de Filomena, han decidido duplicar las toneladas de sal acumuladas, pasando de las 60 de años anteriores a las 120 de este, y repartirán otras 110 más a los vecinos. Asimismo, han adquirido 150 camillas y 200 mantas para estar preparaos ante posibles rescates de personas que deban trasladarse a dependencias públicas ante una emergencia. "Hemos actualizado el inventario municipal, así como los supermercados a los que se puede acceder en caso de emergencia para adquirir alimentos y artículos de higiene y de primera necesidad", explican fuentes consistoriales.

La histórica borrasca también ha tenido su impacto en el Ayuntamiento de Guadarrama, que ha reforzado sus medios para hacer frente a las inclemencias meteorológicas. El Gobierno local ha comprado un silo para el almacenamiento de sal, con capacidad para 70 toneladas, y ha adquirido una máquina para limpiar las aceras. Estos nuevos recursos se han incorporado a su Plan de Acción Municipal, aprobado por la Comunidad de Madrid en diciembre de 2019.

El mismo contempla la disponibilidad de tres vehículos esparcidores de sal con cuchilla quitanieves, tres todo terrenos, dos retro excavadoras, dos dumper, dos camiones y 5 sacas de sal que se distribuyen por diferentes áreas del municipio. En caso de emergencia, se podían movilizar hasta 17 operarios de obras, 17 más del personal de limpieza, ocho del de jardinería, ocho voluntarios de Protección Civil y los agentes de la Policía Local. El Plan aclara, además, las zonas que deberían ser liberadas de nieve en primer término. "Las actuaciones de los grupos de intervención están diseñados para evitar o reducir al mínimo el número de tramos con restricciones al tráfico o retenciones y también su duración y para ser accesible a los peatones los accesos a centros sanitarios, paradas de autobús, centros educativos y edificios públicos", manifiestan desde el Consistorio que encabeza Diosdado Soto.

El protocolo establece una primera fase de preemergencia en la que los servicios municipales alertarían a la población y les recordarían las medidas preventivas entre 8 y 12 horas antes de la incidencia. Acto seguido comenzarían las reuniones para la coordinación del personal actuante y se pondría en marcha el tratamiento preventivo para evitar la acumulación de nieve y la génesis de placas de hielo en las calzadas. Cuando se produce la fase de alarma o el nivel amarillo también se comunica a los vecinos mientras se prosigue con el mantenimiento de las calzadas libres de nieve y hielo. Si se activa la fase naranja se recomienda permanecer en las casas y se determina si se cancelan actividades.