Boris Johnson pide perdón tras el último escándalo pero niega que fuera una fiesta y lo llama "evento de trabajo"

El primer ministro británico Boris Johnson ha pedido finalmente disculpas públicas tras conocerse un nuevo escándalo por una celebración multitudinaria en plena época del confinamiento.

"Asumo mi responsabilidad y pido disculpas", ha dicho el político en el Parlamento en una declaración ante la que había muchas expectativas por si incluso presentaba su dimisión, ante las fuertes presiones recibidas.

Johnson, en esa comparecencia parlamentaria, ha explicado que es consciente de que "hay millones de personas que han tenido que hacer muchos sacrificios estos años y meses" y que tampoco han podido "despedirse de sus seres queridos" cuando han fallecido por covid. Por todo ello, sintió que debía pedir disculpas, pero no dio más pasos.

Este nuevo escándalo surge después de conocerse en las últimas semanas varias fiestas a las que asistió o que incluso organizó Johnson en Downing Street. Ayer se supo que hubo otra, y que tuvo lugar en pleno mes de mayo de 2020, cuando la población aún sufría restricciones y cientos de personas morían en hospitales.

Johnson ha perdido perdón pero ha asegurado que se trataba de un evento de trabajo entre personal del 10 de Downing Street, la sede del Gobierno británico en Londres, rechazando así las acusaciones de haber celebrado una fiesta, al margen del sufrimiento y la preocupación de la sociedad británica en esos momentos de la pandemia.

La oposición pidió su dimisión o una explicación contundente, por lo que parece que no se acabará la polémica y seguirán pidiendo su cabeza, algo que también está ya sucediendo en el propio partido del primer ministro, el Conservador.

El 75% de los británicos, según recientes encuestas, cree que debería dejar de ser el primer ministro.

Una filtración muy dura

Tras la filtración de una imagen de esta fiesta, los medios británicos publicaron un correo electrónico que el secretario personal de Johnson, Martin Reynolds envió en mayo de 2020 a un centenar de personas. Se piensa que esta filtración podría provenir de un asesor que fue despedido por Johnson, y que ahora se cobra su venganza personal.

"Hola a todos, después de un período de mucho trabajo, he pensado que estaría bien disfrutar de este tiempo maravilloso y tomar unas copas, con la distancia social debida. Uníos a partir de las seis, y ¡traed vuestra propia bebida!", rezaba el correo difundido por la prensa inglesa.

El Partido Laborista ha reclamado explicaciones a Johnson en el Parlamento y ha compartido en su cuenta de Twitter la imagen de la polémica fiesta multitudinaria. La oposición ha denunciado que en mayo de 2020, el gobierno había limitado a dos personas no convivientes las reuniones sociales en espacios públicos. "Millones de personas respetaron las reglas. A menudo separados de sus seres queridos. Mientras tanto, los conservadores de Boris Johnson las ignoraron".

Un diputado conservador, en el Parlamento, explotó ante esta postura de su gobernante y llegó a llorar emocionado mientras recordaba que había perdido a su suegra por covid mientras que se conocen este tipo de celebraciones frívolas en pleno confinamiento de 2020.