Los primeros análisis de la autopsia de Esther López, la joven de 35 años que desapareció el pasado 12 de enero en Traspinedo (Valladolid), apuntan a que sufrió una muerte violenta, así lo ha informado el diario 'El norte de Castilla' citando a fuentes de la investigación.
El cuerpo fue hallado durante la mañana del sábado y desde entonces el Instituto Forense de Valladolid se encuentra realizando los análisis pertinentes para determinar la causa de la muerte. Los primeros indicios, según el citado medio, confirmarían así la muerte violenta de Esther.
Las pruebas realizadas han encontrado traumatismos sufridos antes de su fallecimiento, algo que en el análisis externo del cuerpo no se pudo apreciar. El cadáver de la joven fue encontrado vestido con la ropa del día de su desaparición y sin indicios de violencia aparente.
Falleció el día de su desaparición y todo indica a que el cuerpo fue trasladado
Según la información de 'El Norte de Castilla', la autopsia también ha situado su muerte el mismo día de su desaparición, el pasado 12 de enero, y apuntan a que el lugar donde fue encontrado el cuerpo de la joven, no fue el escenario del crimen.
El cadáver de Esther López fue hallado en una cuneta a poca distancia de la carretera que une el municipio de Traspinedo con la Nacional 122. Pero según la investigación, no sería el lugar del crimen y apuntan a que el cuerpo se conservó en otro lugar y fue trasladado posteriormente hasta este punto antes de ser encontrado por un transeúnte.
La joven ha estado desaparecida 25 días y el estado del cuerpo "no es compatible" con haber estado "expuesto" en el lugar del hallazgo "más de 20 días", recoge el mencionado diario citando a fuentes forenses.
De momento no se han facilitado más datos sobre cuáles han sido las causas concretas de la muerte. Hasta la fecha hay 3 investigados en el caso, 2 amigos de Esther, que estuvieron con ella la noche de su desaparición; y otro vecino de la localidad.
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