La primera sesión de control al Gobierno del 2022 ha estado marcada de lleno por los resultados de las elecciones en Castilla y León. Una situación compleja y de aparente ingobernabilidad que ha sumido a los candidatos nacionales en una encrucijada.
Los comicios fueron los más nacionales de la historia de Castilla y León, pues suponían un avance de cómo podrían repartirse los votos de cara a las futuras generales, por lo que todos los partidos se implicaron de lleno.
Los resultados han dejado al PP en una situación de mayoría, pero no absoluta, mientras Vox se ha disparado, Ciudadanos casi ha desaparecido y el PSOE y Unidas Podemos han perdido fuelle. El partido de Santiago Abascal ya ha reclamado tener protagonismo en el Gobierno autonómico si el PP quiere su apoyo, una línea que el PP, en principio, parece que no quiere cruzar y sigue con el objetivo de gobernar en solitario.
Sánchez reitera su ayuda al PP si "rompe" con Vox en todas las comunidades
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vuelto a tender la mano a Casado con la condición de que los populares rompan relación con Vox en todas las comunidades. "Llega la hora de la verdad: Debe decidir si abre las puertas a un gobierno del PP con la ultraderecha", le ha espetado al dirigente popular durante su turno de palabra.
Es la segunda vez que el PSOE ofrece a los populares la abstención en el parlamento autonómico para facilitar la investidura de Mañueco siempre y cuando rompan relaciones con Vox.
Sánchez también ha reprochado a Casado que la situación en la que el PP se encuentra en la región es una "trampa" que ellos mismos han creado y que "le gustaría que otros partidos le sacaran", en una clara referencia al adelanto electoral.
Si (
No(
A favor (
En contra (
