El candidato a la presidencia del PP, Alberto Núñez Feijóo, intervino este sábado en un acto en Santa Cruz de Tenerife acompañado por el líder del PP canario, Manuel Domínguez.
Allí, se refirió durante a la Conferencia de Presidentes en la que participará este domingo en La Palma. En ella, espera lograr convencer a Pedro Sánchez para que, en una situación límite como la que vivimos de fuerte inflación, baje impuestos a la electricidad, al gas, a la gasolina y al diésel: “Eso es gobernar y lo demás es recaudar”.
Tras remarcar que el país puede contar con un Gobierno mejor, incidió en la importancia de tener una política madura que combata la frivolidad vista en estos últimos tiempos. Del mismo modo, señaló que él cree profundamente en España, en el servicio público, en un reformismo tranquilo y en una Europa que es sinónimo de libertad, paz y prosperidad.
También afirmó que los 'populares' deben dar lo mejor de ellos mismos para ofrecer un Gobierno a la altura de los españoles, centrado en la recuperación económica y en la creación de empleo, en la gestión y no en las luchas internas de los ministros o de los partidos que lo conforman, y que comparta las mismas prioridades de la gente.
Feijóo insistió en que la política de nuestro país debe volver a la centralidad y estar basada en la defensa de los intereses generales.
Además, el aspirante expresó que el proyecto que encabeza tiene que ser capaz de establecer un pacto con la mayoría de los españoles, recordando que su modelo en Galicia ha sido el de un PP de mayorías, con un PSOE sin capacidad de mando, un nacionalismo en la oposición y sin representación a la izquierda de los socialistas y a la derecha de los populares.
Reivindicó su trayectoria
Por otro lado, el gallego afeó los ataques recibidos por parte de los miembros del PSOE en estos últimos días, explicando que no van a poder borrar con palabras su trayectoria política durante las últimas 2 décadas.
“Los del PSOE de Galicia quieren que me vaya de allí cuanto antes, tras 13 años ganándoles. Los del PSOE a nivel nacional no quieren que tome posesión como presidente del PP por si también les volvemos a ganar siempre. Ni aún me ido, ni aún he llegado. Ya no pido que me dejen de insultar, sino que lo hagan a su debido tiempo”, aclaró.
Asimismo, ironizó con que lo que no esperan los españoles de su presidente del Gobierno es verlo en un reality show, “aunque su Consejo de Ministros dé para muchos capítulos”.
Igualmente, indicó que no aceptará recriminaciones de Pedro Sánchez después de que éste hiciese vicepresidente a Pablo Iglesias y firmase acuerdos con independentistas de toda clase y condición, apuntando también que lleva 13 años parando los pies en Galicia a los mismos nacionalistas con los que el socialista pacta y que no son capaces ni de acordar una declaración institucional en defensa de la población civil masacrada en Ucrania.
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