Importante esta noticia desvelada por la 'Cadena SER', que explica algunos de los orígenes de esta filtración sobre el 'caso espionaje' en Cataluña.
Resulta que uno de los responsables e impulsores de este informe que tanta polémica ha generado en nuestro país y que ya está teniendo consecuencias políticas, como vimos ayer en el Congreso a la hora de votar un decreto con medidas económicas y que sufrió el boicot de Esquerra Republicana, es un imputado por la Audiencia Nacional.
En concreto se trata de Elies Campo, quien es parte de 'Citizen Lab', el grupo investigador de la Universidad de Toronto que ha destapado el escándalo.
Este grupo que está en el punto de mira fue quien junto al medio 'The New Yorker' publicó que unos 65 lideres independentistas han sido espiados en los últimos años con el sistema de seguimiento israelí Pegasus, que supuestamente sólo se vende a Estados aliados.
Elies Campo lleva 2 años investigado/imputado por la Audiencia Nacional y la Guardia Civil sigue la pista desde entonces por haber diseñado presuntamente programas informáticos que permiten votaciones electrónicas. En concreto, se piensa que sería una de las personas que presuntamente estaría detrás del colectivo 'Tsunami Democràtic', que tanto se intentó desvelar durante el procés y el conflicto social y político posterior a la sentencia condenatoria de los líderes secesionistas de 2017.
Además, otros presuntos activistas que fueron espaidos con Pegasus serían también personas acusadas o investigadas en este proceso judicial.
Tsunami Democràtic
Según fuentes policiales, Campo forma parte de esta causa judicial contra 'Tsunami Democràtic' por promover, entre otras cosas, desórdenes públicos a través de protestas callejeras. La investigación sigue hoy, años después, abierta y en estatus de secretismo total sobre estos activistas y organizadores.
La Audiencia Nacional también sigue la pista a uno de los socios de Elies Campo, un ingeniero que reside en Suiza, y ya se habría pedido una comisión rogatoria a ese país para poder rastrear sus actuaciones.
Campo también es investigado por intentar montar un entramado financiero que apoyara la causa con criptomonedas, pero según fuentes policiales fracasó en este proyecto, auqnue los activistas y socios viajaron "en varias ocasiones al extranjero para recopilar información", explica la 'SER'.
Esta noticia podría ser un primer paso de las filtraciones por parte del Gobierno para ir desvelando los motivos del presunto espionaje, como ya hizo Margarita Robles el martes en el Congreso, insinuando que lo reconocía y que estaba justificado por motivos de seguridad del Estado contra secesionismos. Además, si los teléfonos de estas personas investigadas en causa judicial fueron intervenidos, podría estar justificado y legitimado por permisos de los jueces.
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