Crítica de la película 'Doctor Strange en el multiverso de la locura': ni tan extraña, ni tan loca

'Doctor Strange en el multiverso de la locura' es la vigesimoctava película del Universo cinematográfico de Marvel, es, también, la secuela de 'Dr. Strange', la primera película en la que este personaje era el protagonista.

Asimismo es, en cierto modo, la continuación de 'Spider-Man: No Way Home' y, sobre todo, de una de las pocas cosas dentro de este universo en el que Marvel se ha mostrado un poco más creativo, la serie de televisión 'WandaVision'. ¿Se han perdido? No se preocupen es normal, pero que sepan que esa era la parte fácil y que el argumento nos lleva por numerosos universos y por varias versiones de nuestro protagonista, interpretado por Benedict Cumberbatch.

En fin, habrá que entrar en materia, para ello he de evisar que es casi imposible hacer una crítica de esta interminable serie de películas sin hacer algún espóiler (aunque intentaré dejarlos al mínimo), así que si usted no ha visto esta película, ni alguna de las 27 películas anteriores o sus múltiples productos televisivos, y prefiere enterarse poniéndose a hacer los deberes y ver el material que le falta, le espero dentro de unos meses. Si ya lo ha visto todo o no le importa lo más mínimo, puede continuar.

El caso es que lo más novedoso de la película es que está dirigida por Sam Raimi, el director de la trilogía original de 'Spiderman', la protagonizada por Tobey Maguire, que llevaba casi diez años sin dirigir un proyecto para la gran pantalla. El caso es que tras el éxito del regreso de todos los Peter Parker en la anterior película de Marvel, han decidido llamar de vuelta al bueno de Raimi y le han encargado unir esta película con diversos de sus múltiples proyectos, algo perfecto para una película cuya idea principal es la del Multiverso, una serie infinita de universos que existe a la vez.

Marvel y sus universos

La idea del Multiverso es una forma más de Marvel de asegurarse de no quedarse nunca sin mundos y universos que puedan desaparecer, porque seamos claros, aquí lo importante es que haya una amenaza gigantesca en la que el mundo (uno de ellos) va a desaparecer, pero tras veintitantas películas y varias series de televisión, con el malo malísimo original desaparecido, hay que seguir buscando nuevas formas de que todo se pueda ir al traste, y lo bueno que te da el Multiverso es que esta vez se pueden permitir el lujo de acabar con un universo de vez en cuando, incluso de matar, de formas muy divertidas en esta película, a unos cuantos héroes. Lo que pasa es que también se les puede ir fácilmente de las manos, como creo que les está pasando y que el 'Deus Ex Machina' se convierta en la regla absoluta. Por cierto ¿por qué todos los Steven Strange son idénticos mientras que los Peter Parker no? Y, más importante, ¿por qué el Señor Fantástico tiene la cara del bueno de Jim de 'The Office'? (aunque detrás de esto puede haber una nueva broma a costa de 'WandaVision' y los hábitos televisivos de Wanda Maximoff, mejor conocida como La Bruja Escarlata).

El caso es que no se puede negar que la película no sea entretenida, lo es. Sobre todo cuando Raimi en el tramo final decide pasárselo en grande, traer a sus queridos muertos vivientes y recordar al mundo que mucho antes de dirigir la primera trilogía de 'Spiderman', había revolucionado el cine de terror con la divertidísima trilogía de 'Posesión infernal', pero eso no termina de quitar la sensación de que Marvel sigue más interesado en seguir alimentando su gigantesca pescadilla que se muerde la cola que en hacer películas que tomen verdaderos riesgos. Y es que este 'Multiverso de la locura' es mucho menos extraño y loco de lo que nos quieren vender, incluso por debajo de los riesgos tomados en 'WandaVision', la serie de la que es clara continuación, mucho más que de las andanzas del personaje protagonista.

Así que 'Doctor Strange en el multiverso de la locura' no es ni la mejor, ni la peor, película de esa interminable serie de muñecas rusas de Marvel, cada vez más grandes en vez de pequeñas, sino una más. La adición de Raimi se nota, pero no tanto, estaría bien que, por una vez, decidieran arriesgar de verdad y dejar que este director convirtiera las andanzas del Doctor Extraño en una peli de terror tan divertida, extraña y loca como 'Terroríficamente muertos'.