Desde el Partido Popular llegan voces de aviso: alguien, desde Madrid, y más concretamente desde los aledaños de algún medio de comunicación radicado en Madrid, anda lanzando los tejos a Ciudadanos por Cataluña, Ciutadans per Catalunya, para que expandan su mensaje (aunque nadie sepa muy bien cuál pueda ser este mensaje fuera del ámbito catalán, por cierto) y presenten listas electorales en diferentes puntos de España. Ciutadans, que ha dejado en el camino a sus más emblemáticos apoyos iniciales, es ahora un partido pilotado por gentes inexpertas, que dicen abominar de los partidos y que se sienten abrumadas por su propio éxito, que ciertamente no esperaban.
Las ofertas (indirectas) a la ya ex socialista vasca Gotzone Mora, o las insinuaciones a la que sí sigue (y seguirá) siendo militante del PSE Rosa Díez, para que se incorporasen a listas de 'Ciudadanos' por Madrid o Bilbao, no pasan de ser globos sonda de quienes tratan de apropiarse ahora de la votación recibida por Ciutadans en las elecciones del 1 de noviembre. Es una maniobra más de quienes dicen apoyar una determinada opción política, el PP, aunque, en realidad, estén destrozando al principal partido de la oposición y al sistema, según te dicen en la sede de Génova. Donde, sin embargo, no acaban de deshacer el nudo gordiano. Y puede que la aprensión de los más afines a Rajoy esté plenamente justificada: ¿quién, desde posiciones de derecha radical, quiere debilitar a la derecha moderada y por qué?
Si (
No(
