La Policía detuvo en 2006 a 161 personas por delitos de piratería

Durante estas operaciones policiales desarrolladas el pasado año, fueron intervenidas casi 70.000 películas pirateadas, 63.600 CD musicales, más de 37.500 prendas de vestir, 18.769 bolsos de prestigiosas marcas, 13.649 pares de zapatos, móviles e incluso imágenes religiosas. La última de estas operaciones, realizada por el Grupo de Delitos contra la Propiedad Intelectual e Industrial y las brigadas provinciales, se desarrolló el pasado 27 de diciembre cuando fueron intervenidos en una nave de un polígono industrial de la localidad madrileña de Fuenlabrada 600 bolsos falsificados de una conocida marca.

En esta intervención fue detenido el propietario de la nave, Lin Y., de nacionalidad china y 34 años, acusado de importar estos artículos desde el sudeste asiático para distribuirlos posteriormente entre compradores mayoristas por toda España. La nave comercial ya había sido objeto de otras dos operaciones anteriores, a finales de 2005 y en mayo de 2006, en las que se intervinieron un total de 27.976 bolsos de las mismas características y marca.

De los 161 detenidos a lo largo del pasado año, 106 son españoles y 33 son de nacionalidad china. Además de la música y vídeos, las prendas de vestir, bolsos y móviles intervenidos, la Policía se ha incautado de objetos falsificados como 220 cinturones de adelgazamiento, 264 filtros de aire, 1.050 pilas, 1.049.638 peluches y 9.298 imágenes religiosas, entre otros artículos.

Tres detenidos en Madrid
Por otro lado, la Policía ha detenido en Madrid a tres personas acusadas de un delito contra la propiedad intelectual por la distribución de una copia pirata de un programa informático utilizado por las empresas de artes gráficas. En la denominada operación "Arlequín" se han inspeccionado varias empresas del sector de artes gráficas en las provincias de A Coruña y Valencia, que utilizaban en su actividad laboral la copia ilícita del programa informático denominado "Harlequín Rip". Dicho programa, muy específico y caro, se emplea para al procesamiento y preparación de los documentos a imprimir a nivel industrial, explicó la Policía.

La empresa titular de los derechos de propiedad intelectual denunció a dos sociedades ubicadas en Madrid que distribuían dicho programa a las empresas de A Coruña y Valencia. La Dirección General de la Policía recordó el perjuicio patrimonial que generan estas prácticas a las empresas titulares de los derechos de la marca.