Los socialistas recuerdan el Madrid "alegre y habitable" de Tierno Galván

Como cada 19 de enero desde hace 21 años, los socialistas depositaron una corona de flores sobre la tumba en la que reposan los restos de Tierno Galván tras la despedida que le brindaron los madrileños en un acto que para el senador y ex alcalde de la ciudad, Juan Barranco, "será irrepetible". El secretario general del PSM-PSOE, Rafael Simancas; el candidato socialista a la Alcaldía de Madrid, Miguel Sebastián; el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Oscar Iglesias, y el senador Juan Barranco evocaron la figura de Tierno Galván y su manera de hacer política.

Miguel Sebastián, que recordó que la muerte del "viejo profesor" le sorprendió en el Ministerio de Economía a su regreso de EEUU, aseguró que la mejor forma de recordarle es "ponerse a trabajar por recuperar el Madrid por el que luchó Tierno Galván", quien le produce, dijo, "un gran impulso de energía, entusiasmo y ganas de afrontar el futuro". Recordó al que fue alcalde durante seis años y medio como símbolo de "modernidad, inteligencia y honradez"; elogió su "afán" por los ciudadanos; y se refirió al Madrid de Tierno Galván basado en "la convivencia, la calidad de vida e igualdad de oportunidades".

Simancas, por su parte, reivindicó los valores que inspiraron la actuación de Tierno, Barranco y Joaquín Leguina, que "abrieron las puertas" al régimen de libertades y derechos que hoy disfrutamos, así como "los talantes" que predominaron entonces. Citó entonces "la humildad frente a la soberbia; la cercanía frente al despotismo supuestamente ilustrado de unos y de populismo estéril de otras; y el afán de convencer al adversario frente a la voluntad de barrer al enemigo político".

Rememoró además el principio de prevalencia del interés general frente a los "partidarios" asegurando que a Tierno Galván, Barranco y Leguina "jamás se les hubiera ocurrido faltar a la cabecera de una manifestación en solidaridad con las víctimas del terrorismo y contra la violencia" y "jamás hubieran esgrimido como causa la consigna del partido". Reclamó también la colaboración leal entre instituciones por encima de los desencuentros personales -"Tierno, Barranco y Leguina no se iban de copas juntos todas las noches pero jamás pusieron en peligro el interés general por sus diferencias"-, así como el servicio a la ciudadanía por encima del servicio "a la ambición personal y del partido".

El portavoz municipal socialista, Oscar Iglesias, manifestó que hoy en día las diferencias entre lo que hubo y lo que hay en el Ayuntamiento son "evidentes": frente al alcalde que "ha destrozado Madrid" y que "sólo se acuerda de los ciudadanos para subirle los impuestos" hubo un Enrique Tierno Galván que hizo una sociedad "abierta y tolerante, con parques, auditorios y oportunidades para todos". Iglesias, que recordó el Madrid del "viejo profesor" como "más habitable y menos deshumanizado; más acogedor y menos osco; más alegre y menos centralista; y más culto y menos pueblerino", consideró que la "modernidad" del actual regidor, Alberto Ruiz-Gallardón, "está reducida al hormigón, al ruido y a la especulación".

El senador Juan Barranco subrayó la conexión que Tierno Galván tuvo con los jóvenes: su talante -"que ahora nos vendría muy bien a todos"-, su forma "bondadosa y comprensiva" de hacer política y su capacidad para conectar con los ciudadanos, aspecto que, auguró, "debe ser una guía a seguir" en los próximos meses para recuperar los valores del político "más querido" en el Ayuntamiento de Madrid