La Iglesia Católica de Bolivia pronosticó hoy una mayor tensión política, tras el fracaso del nuevo intento de diálogo entre el Gobierno y la oposición sobre el proyecto de Constitución y los procesos autonomistas de cuatro de las nueve regiones del país.
El secretario general de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), monseñor Jesús Juárez, afirmó este jueves, en un comunicado, que la Iglesia lamenta que "una vez más se haya truncado este proceso" por la desconfianza entre el Gobierno y los opositores.
"El futuro inmediato anuncia un clima mayor de tensión por las contiendas políticas de los próximos meses", señaló Juárez, al indicar que "la polarización" ha desplazado temporalmente el camino del "diálogo responsable".
El intento de negociación fue suspendido el miércoles por el Gobierno hasta después del referendo revocatorio al que se someterán el próximo 10 de agosto el presidente Evo Morales y los prefectos departamentales.
A la mesa del diálogo, en la que participaban como observadores delegados de la Iglesia y los Gobiernos de Colombia, Argentina y Brasil, solo habían asistido partidos de oposición minoritarios que finalmente abandonaron las conversaciones el martes.
A ese foro en ningún momento acudieron los prefectos autonomistas de Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando, ni la principal fuerza de la oposición Poder Democrático y Social (Podemos, derecha).
La Iglesia también señaló que mantiene la esperanza "de que los actores políticos comprendan que hay que sentarse a la mesa del diálogo, no como recurso de cálculo político, sino con una sincera y profunda convicción de concertación".
El revocatorio fue planteado por Morales a finales del año pasado como una posible salida a la crisis que afronta el país, y la oposición, que había bloqueado esta propuesta en el Senado, la aprobó de forma sorpresiva a mediados de mayo.
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