El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, presentó ayer jueves un plan choque de 24 medidas económicas destinado a combatir lo que definió como "el estancamiento y el frenazo" de la economía española.
Son 24 reformas, que se pondrán en marcha este año y el próximo, y que se aplicarán en seis sectores concretos: financiación de Pequeñas y Medias Empresas (PYME), vivienda, transporte, energía, telecomunicaciones, medio ambiente y servicios.
El gabinete ministerial de Zapatero celebró hoy una reunión extraordinaria para dar el visto bueno a este programa que el propio presidente del Ejecutivo presentó en una rueda de prensa.
El presidente aseguró que las medidas aprobadas hoy se enmarcan en las posibilidades de actuación del Ejecutivo y no son, en contra de lo que opina la oposición, "pan para hoy y hambre para mañana".
La situación de la economía es de "estancamiento y de frenazo", de "dificultades" y de "retraimiento fuerte", admitió el presidente, quien no utilizó el termino de "crisis" para definir el momento actual.
Tras recordar que su Gobierno está trabajando desde el primer día para recuperar el crecimiento, Zapatero aseguró que no va a "regatear" ningún esfuerzo en este sentido.
Su plan incluye, por ejemplo, avales millonarios para la financiación de las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes) y para el impulso de la vivienda de protección oficial, una propuesta legislativa para fomentar el alquiler y la eficiencia energética de edificios, la reducción paulatina de las cargas administrativas a las empresas o la eliminación del Impuesto sobre el Patrimonio.
Son propuestas que, según Zapatero, "suman y apoyan para lograr más capacidad de crecimiento".
Para la oposición, sin embargo, no son más que un "refrito desafortunado" que "no hace sino agravar la crisis" económica y la "crisis de confianza hacia el Gobierno".
Así definió el plan del Ejecutivo Cristóbal Montoro, el portavoz de Economía en la Cámara Baja del conservador Partido Popular (PP), que es la principal fuerza de la oposición en España.
En su opinión, Zapatero ofreció hoy una imagen "patética" y demostró que el Gobierno sigue "siendo incapaz de reconocer la gravedad de la situación".
Para otras formaciones políticas, como los nacionalistas gallegos del Bloque Nacionalista Gallego (BNG) y los catalanes de Convergencia y Unió (CiU), son medidas "insuficientes" para hacer frente a la crisis actual, mientras que desde los sindicatos, la Unión General de Trabajadores (UGT) valoró que no supongan recortes sociales.
Zapatero aseguró que los datos económicos de España muestran que tiene una capacidad mayor que el resto de países que, según destacó, también atraviesan dificultades.
La oposición le recuerda, no obstante, que la economía española registra desde hace meses un deterioro muy claro que se ha manifestado en el empleo, el consumo privado y la actividad empresarial y que, en definitiva, se ha hecho sentir también en el grado de bienestar que ha caracterizado a la sociedad española en los últimos años.
Según datos proporcionados hoy mismo por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la economía española sufrió un frenazo entre abril y junio al registrar un alza intertrimestral del 0,1 por ciento, dos décimas menos que en el primer trimestre.
De acuerdo con este indicador, el crecimiento interanual en España se sitúa en el 1,8 por ciento, nueve décimas menos que entre enero y marzo.
Este miércoles se conoció otro dato significativo, el de la bajada de cinco décimas de los precios en el pasado mes de julio, lo que no impidió que la inflación haya alcanzado una tasa interanual del 5,3 por ciento, la más alta en España en los últimos dieciséis años.
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