El Decreto sobre divisas servirá para controlar los flujos de dinero

La norma establece que el ingreso al país de montos de hasta 50.000 dólares deberá ser registrado en un formulario de la Aduana y si la suma se sitúa entre 50.000 y 500.000 dólares será necesaria "una autorización" del Banco Central, explicó Arce.

Si el monto es mayor a medio millón de dólares, el permiso será emitido por el ministerio de Hacienda. En el caso de que las declaraciones sean imprecisas, las personas o entidades serán sancionadas con una multa igual al 30 por ciento de la diferencia entre el monto declarado y el encontrado en la revisión del equipaje, además de sufrir otras acciones legales.

El ministro recordó que en 2007 un banco ingresó en el país 44 millones de dólares en diversos viajes sin que nadie pudiera controlar tal operación, de la que las autoridades se enteraron por casualidad.

En general, dijo, existe una susceptibilidad sobre el posible "blanqueo de dólares, de euros, de operaciones ilícitas" en Bolivia. "Queremos estar seguros de que el dinero en moneda extranjera que está circulando en el país es legítimo, es legal, es un dinero que no es falsificado y tiene la legalidad para circular", afirmó.

También enfatizó que las operaciones de inversionistas o de empresas a través del sistema bancario, con cheques o remesas, se harán como hasta ahora porque ya existe un control de la Superintendencia de Bancos, del Banco Central y las mismas entidades bancarias.

La nueva regulación no afecta al movimiento de dinero de las personas que salen de Bolivia por turismo o compras, con menos de 50.000 dólares, pero que en todo caso deben declarar los montos ante la aduana del país al que se dirigen, aclaró.

"El Gobierno no está prohibiendo el ingreso o la salida de divisas", remarcó Arce al rechazar interpretaciones en el sentido de que podría establecerse un control del flujo divisas.