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Hoy el Ibex dejó lo bueno para el final. Y es que los decepcionantes datos macroeconómicos conocidos en Alemania dejaron un amargo sabor de boca que, sin embargo, Wall Street consiguió mitigar. Y es que siempre viene bien un traguito de confianza, sobre todo si llega desde la primera economía del mundo. El Ibex se dio la vuelta tras conocerse el aumento del índice de confianza estadounidense.
El Ibex logró no sólo cerrar en verde, sino regodearse en su aparente recuperación. El selectivo español se apuntó una subida del 0,82% y se situó en 11.419,90 puntos. Un cambio de tercio significativo, si se tiene en cuenta que había llegado a rozar mínimos anuales intradía a mitad de jornada. De nuevo, es la plaza española la que destaca en el Viejo Continente y se apunta los mayores avances.
La jornada comenzó mal. A los inversores les faltaba confianza, a los valores les faltaba tirón y a los datos macroeconómicos les faltaron cifras convincentes. Lo que no se esperaba el mercado era que fuera Wall Street el que impulsara su recuperación en los últimos momentos de cotización, pero así fue. Y es que los buenos datos macroeconómicos que se conocieron en la primera bolsa del mundo no sólo facilitó la tarea de salir de compras a los inversores estadounidenses. Ni los vaivenes en el mercado Forex entre el euro y el dólar ni el rebote en el precio del petróleo evitó que el Ibex se despidiera con avances que le dejaron por encima de los 11.400 puntos.
Los datos que llegaron del otro lado del charco...
El índice de confianza del consumidor que elabora el instituto Conference Board volvió a sorprender de manera positiva en el mes de agosto. Por segundo mes consecutivo, este indicador subía y registraba un incremento hasta los 56,9 puntos, desde los 51,9 puntos del mes anterior y frente a las expectativas de los analistas que esperaban una lectura de 53 puntos.
Aunque su nivel interanual sigue siendo relativamente bajo y la preocupación por el estado de salud del mercado labora persiste, a los operadores les servía para salvar una sesión que se estaba complicando.
Además, el rebote de Freddie Mac relajó los ánimos también en el sector bancario español. Y es que uno de los valores que casi dejan al Ibex en sus mínimos anuales fue Santander, que sufrió descensos a causa de la exposición que el Sovereign reconoció en los gigantes hipotecarios estadounidenses. Así, después de haber estando perdiendo alrededor de un 2,5% durante la jornada, la entidad que preside Emilio Botín se sumó, al cierre de la sesión, poco más de un 0,3%. El cambio de tercio del Santander tiró del resto de valores del sector bancario. Entidades como Banco Popular y BBVA se apuntaron avances de algo más de un 1,6%, poco más de un 1,3% y algo más de un punto porcentual, respectivamente.
Pero, aunque fue Inditex la que logró instalarse en el primer puesto de la tabla con una subida de poco más de un 4%, fue la recuperación de pesos pesados como Telefónica e Iberdrola las que inyectaron optimismo al Ibex. La operadora presidida por César Alierta se apuntó un leve 0,06% al alza, una subida bastante tímida pero que llega un día después de que anunciara que cobrará la identificación de llamada, algo que no ha sentado nada bien ni en el mercado ni entre los consumidores.
La eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán, por su parte, se revalorizó casi un 2% después de conocerse que Hillary Clinton se haya mostrado a favor de que Iberdrola compre Energy East.
Avanza confianza del consumidor de EU en agosto
Se recupera el índice y sube hasta 56.9 puntos, más de lo previsto por los analistas, pero aún se encuentra en la mitad que hace un año se ubicada en 105 puntos cuando estalló la crisis crediticia
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