www.diariocritico.com

Consiguieron que salieran alertas al acceder a nuestras webs

Así fue el ataque 'hacker' contra las webs del Grupo Diariocrítico

Así fue el ataque 'hacker' contra las webs del Grupo Diariocrítico

> Aún aparecen advertencias de seguridad porque la alerta se quedó en las cachés de los ordenadores

viernes 28 de diciembre de 2012, 10:26h
Los periódicos del Grupo Diariocrítico, como es sabido, sufrieron varios ataques 'maliciosos' desde el pasado sábado 22 y duraron de forma intermitente hasta el miércoles 26. Nuestras webs han sido 'hackeadas', por lo que se presentará la correspondiente denuncia a la Unidad de Delitos Informáticos de la Guardia Civil. El hecho de que los delitos hayan sido cometidos aprovechando los festejos navideños, cuando la vigilancia de seguridad es menor, y coincidiendo con un espectacular alza en el número de nuestros visitantes, hace pensar en una acción coordinada para perjudicar a nuestro periódico, silenciando, aunque sea solamente por unos días, nuestra voz, en lo que constituye un atentado antidemocrático contra la libertad de expresión. Les explicamos cómo fue el ataque.
Tal y como nos informan nuestras empresas informáticas, GCD y Ozongo, el ataque 'hacker' consistió en lo siguiente:

1.- No se podía acceder al periódico Diariocrítico.com, aunque éste siempre se mantuvo totalmente operativo pese a los innumerables intentos de ataque. Nunca lograron 'tirarlo', pero la advertencia de Google hacía que los lectores descartaran el acceso.

2.- Diariocrítico emplea para la administración de su publicidad uno de los principales y más reputadas herramientas de anuncios, de origen norteamericano. Al no poder acceder al periódico, los hackers optaron por atacar dicho servicio, con agujeros de seguridad ajenos a nuestra administración. Incluyeron líneas de código en uno de los anuncios, pero en ningún momento supusieron ningún riesgo para la navegación o al lector.

3.- Google, al pasar el robot de control por el anuncio, consideró que era una pieza nociva, y fue engañado para que informara al lector sobre el posible contenido inadecuado del site. Por eso casi todos nuestros lectores fueron advertidos de la amenaza y dejaron de acceder.

4.- Diariocrítico procedió a informar a Google del engaño y éste restableció el servicio de manera inmediata, aunque como el ataque se repitió en varias ocasiones, también bloqueó el acceso a Diariocrítico casi de continuo.

SOLUCIÓN: La página está en estos momentos limpia de virus al 100%, pero puede que algunos lectores sigan leyendo el mensaje de Google y su navegador que alerta sobre software malicioso, aconsejando no acceder a la web. Esto se debe a que algunos lectores entraron al periódico durante el ataque, y puede que haya quedado almacenada en alguna parte del navegador o de su sistema el aviso de Google. Una solución pasaría por limpiar la caché del navegador, así como los archivos temporales y cookies tanto del navegador como del sistema operativo empleado. Una herramienta ajena y gratuita muy útil es Ccleaner.


El ataque

La gravedad del ataque se puso de manifiesto teniendo en cuenta que los 'hackers' obligaron, al introducir un virus en nuestro sistema, a que Google insertase un aviso advirtiendo de que, abriendo la página de nuestro periódico principal, el visitante podría resultar infectado. Se pretendía, así, atentar no solo contra nuestros visitantes, sino contra la reputación de solvencia técnica de nuestro Grupo Diariocrítico y de su socio tecnológico. Las dificultades se han solventado y seguimos la pista a los delincuentes que tan graves perjuicios han pretendido causarnos, contando, como no podía ser de otro modo, con la colaboración de Google.
 
El Grupo Diariocrítico ha abogado siempre por una más completa legislación en materia de Internet. Hace tres años, organizamos, en el Colegio de Abogados de Madrid y contando con la participación de notables expertos en la materia, un seminario para detectar los 'agujeros' que en materia legal se observan en la Red. Pensábamos, y pensamos, en coincidencia con no pocos especialistas, que no pueden ampararse ni la tolerancia existente en lo que a Internet se refiere, ni el vacío legislativo en lo tocante a los delitos en la Red -parece que solamente se persiguen los delitos que tienen que ver con cuestiones sexuales, lo que, desde luego, nos parece muy bien, pero insuficiente-, ni podemos admitir el aura de simpatía que rodea a los grupos de 'matones informáticos' que actúan desde el anonimato y con la mayor impunidad.
 
Creemos que esa simpatía, que algunas causas justas se han ganado como con las acciones de Wikileaks y la posterior persecución de Julian Assange, o las emprendidas por el colectivo Anonymous'-. Pero también se pone así en entredicho cuando 'gamberros sociales' atentan contra los intereses de empresas informativas, y no solamente informativas. Porque o no les gusta algo de lo que los medios decimos o porque, simplemente, les divierte esa sensación de superioridad que proporciona actuar desde las sombras, lo que siempre, claro, da ventaja.
 
Estamos ante un reto sin precedentes contra la libertad de expresión en su más moderna y nueva acepción. Creemos que la maravillosa autopista de comunicación que es Internet puede quedar desvirtuada con acciones de este tipo, estériles pero dañinas. Las autoridades de toda condición, la sociedad civil, no pueden permanecer indiferentes ante los abusos, los fraudes, la burla, que algunos delincuentes hacen de lo que deberían ser unas reglas de juego honestas, limpias y libres. Ignoramos las razones concretas por las que hemos sido atacados: ¿habremos dicho algo que ha molestado a determinados intereses? ¿Somos una competencia molesta precisamente cuando más crecemos? ¿O habrá sido porque sí, porque nos ha tocado ser el blanco de una gente asocial, a la que le encanta jugar a hundir a quienes solamente pretendemos informar y analizar la realidad, desde la independencia posible y el rigor deseable?
 
No es el primer ataque informático, aunque sí el más serio, que hemos recibido en los últimos meses, en los que también padecimos un extraño robo, más preocupante, al parecer, por lo que había en nuestros ordenadores y en nuestros archivos que por los efectivos de valor -bien escasos, por lo demás- que pudiesen encontrarse en nuestra redacción; hasta ahora, la policía científica no parece haber encontrado sino indicios de posibles autorías. Pelear contra todos  estos elementos, además de contra la crisis económica que devasta los medios de comunicación, es duro y difícil. Pero no se preocupen: no vamos a tirar toalla alguna. Y seguiremos alzando nuestra voz, por muy humilde y moderada que sea, contra la injusticia que supone permitir que determinados delincuentes, que eso es lo que son, se paseen tranquilamente por nuestros ordenadores.

Agradecemos sinceramente los numerosísimos mensajes de solidaridad de muchos lectores, amigos, colaboradores y seguidores del periódico. Hemos saltado otro obstáculo, sabiendo que, si ladran, es porque cabalgamos, y lo hacemos con todos ustedes. Gracias, de verdad. Nos vemos en 2013 y por muchos años más, aunque les pese a algunos...


- Nuevamente nos atacan los antidemócratas
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
5 comentarios