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Pixar la nueva Disney

Pixar, la nueva fábrica de sueños

Pixar, la nueva fábrica de sueños

lunes 03 de agosto de 2009, 17:37h
Como si se tratase de un gran director, Pixar se ha hecho con el corazón de los amantes del cine. Desde hace varios años muchos cinéfilos esperan como agua de mayo el nuevo estreno de Pixar. Para ello se mezclan con el público infantil y disfrutan como el crítico culinario de 'Ratatouille' de una regresión a la infancia, cuando todo era más mágico y los 'buenos' acababan con los 'malos'. Pero, ¿quién diablos es Pixar?
Durante muchos años los largometrajes de animación, o de dibujos animados que era como los llamábamos, eran sinónimo de Disney. La factoría de los sueños de Walt Disney fue la responsable del primer largometraje de dibujos animados de la historia, “Blancanieves y los siete enanitos”. Después de aquello llegarían otros hitos para la marca, “Pinocho”, “Fantasía”, “Dumbo” o “Bambi”. Walt Disney se había convertido en la gran referencia mundial de la animación.

Durante muchos años esto siguió siendo igual, incluso en los años en los que los largometrajes de animación parecían cosa del pasado. Desde Oriente se produjo la gran revolución con la productora Studio Ghibli y, más concretamente, con el maestro Hayao Miyazaki que con largometrajes como “Nausicaa del Valle del Viento” o “Mi vecino Totoro” consiguió en los años 80 dar nuevo lustre a la animación. Pero, incluso en sus películas posteriores como “La Princesa Mononoke” o “El viaje de Chihiro”, Miyazaki siempre optó por la animación tradicional, dibujando a mano cada plano de la película. Es más Disney recuperó el favor de la taquilla con largometrajes como “La sirenita” o “La bella y la bestia” que seguían la misma línea. No fue hasta 1995 cuando llegó a los cines la primera película comercial realizada enteramente por ordenador, su nombre “Toy story” y su productora, Pixar.

La historia de Pixar

Pixar surgió como una escisión de la Industrial, Light & Magic de George Lucas. En 1986 llegó el primer hito de la compañía, la creación de Luxo Jr., en el que las líneas básicas y los movimientos fueron pulidos. Luxo es la imagen de marca de la compañía. Sí, ese flexo que aplasta a la letra “I” de “PIXAR” en la presentación de todas sus creaciones. Al principio la compañía se dedicó de pleno a los cortometrajes, algo que tampoco ha abandonado desde que triunfó con los largos. La mayoría de sus películas se siguen abriendo con un corto de la compañía, algunos tan memorables como “Presto” de 2008, aquel en el que un mago y un conejo pelean durante su número de magia.

Pero todo cambiaría en 1995 con el tremendo éxito de “Toy Story” la aventura de Woody y Buzz Lightyear, dos juguetes muy humanos. A partir de aquí la industria de la animación por ordenador sufrirá un tremendo auge, lo que llevará a Disney a cerrar su fábrica manual y cambiarla por una de ordenador. Con el tiempo también verá como Disney comprará Pixar por más de siete mil millones de dólares, aunque por una vez un acuerdo de este tipo no supondrá la pérdida del control creativo para Pixar, incluso Disney cedió el control de su estudio de animación a Pixar. El cambio se había realizado y Pixar se había convertido en el nuevo referente de la animación, quizás dentro de 50 años Mr. Increíble, la rata Remy, Wall E o Buzz Lightyear sean los nuevos Mickey Mouse, Pato Donald o Pluto.

Sus mejores creaciones


Pixar sólo ha estrenado 10 largometrajes en su historia, lo que da una señal del mimo con el que esta gente cuida a sus creaciones. Las películas que ha estrenado han sido Toy Story (1995), Bichos (1998), Toy Story 2 (1999), Monstruos S.A. (2001), Buscando a Nemo (2003), Los Increíbles (2004), Cars (2006), Ratatouille (2007), Wall E (2008) y Up (2009). Muchos directores actuales querrían tener una filmografía tan increíble como esta, pero eso es algo difícil de encontrar y es que en cada proyecto de Pixar hay implicado mucho talento y dedicación. Gente como John Lasseter, Brad Bird o Pete Docter se han ganado ya un hueco en nuestro corazón. Pero si hubiese que elegir los tres mejores largos de Pixar cada persona tendría una respuesta distinta. Aquí van los míos:

Ratatouille. La mejor película de Pixar y una de las mejores de la década, es increíble que desde la animación alguien haya podido escribir una historia como esta. Una rata encandilada de la alta cocina nos emociona como pocos personajes de carne y hueso. Se lo dice alguien que no aprecia mucho ni a las ratas ni a la alta cocina.

Wall E: La primera parte de esta película es un ejemplo perfecto de narración audiovisual sin palabras. Pixar da una clase de cómo narrar con imágenes a toda una generación de directores que parece que no hayan visto nunca una película de Buster Keaton.

Up: Pixar nunca se ha caracterizado por dar protagonismo en sus obras a personajes obvios. Ni los amables monstruos del armario ni los superhéroes barrgudos, son ejemplos de protagonistas de películas de Hollywood, pero darle el ‘prota’ a un anciano de 78 años en una película para niños es una nueva vuelta de tuerca. 'Up' es, sencillamente, lo mejor que hay actualmente en las carteleras.

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