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Perera, triunfador en 2014, pasó sin pena ni gloria

Abellán recibiendo a 'portagayola' a su primer toro
Abellán recibiendo a 'portagayola' a su primer toro

San Isidro: Fandiño torea y Abellán corta oreja en interesante corrida de Parladé con un airazo molesto

viernes 15 de mayo de 2015, 22:57h
El santo patrón, tan taurino él, no se portó bien con la Fiesta. Porque un airazo desatado, que molestó a tope a los coletudos, impidió la celebración con cierta normalidad de un festejo con bicornes exigentes y nuevo regalo de trofeo. Esta vez para Abellán, mientras que a Fandiño, que toreó mejor, no se le concedió. Perera, vulgar. 
"Así no se puede torear". Una frase tópica a veces cuando el aire molesta, que fue este viernes absoluta y tristemente cierta por el ventarrón, protagonista negativo en el día del santo que da nombre a la Feria. Vaya por delante ese mérito de la terna que observaba impotente como los engaños volaban dejando al descubierto el cuerpo de Miguel Abellán, Miguel Ángel Perera e Iván Fandiño, quienes no pudieron alcanzar el nivel que se supone habrían dado en otras circunstancias climatológicas no tan desfavorables.

Además, el encierro cinqueño de Parladé, triunfador absoluto en 2014 -por la mañana se descubrió el azulejo que así lo rememora-, sin llegar tampoco a semejante juego, sí aportó en general movilidad, entrega en los caballos y codicia en el último tercio en grado desigual. Lo que fue muy parigual es la bella estampa y la presentación, por fin, de la corrida, después de tantos días de zamacucos de mucho  volumen y poco trapío.

El que, en principio, pareció más dispuesto de los tres espadas fue Miguel Abellán, quien siguiendo la absurda moda al uso, se fue a portagayola a recibir al que abría festejo -luego repetiría en el cuarto y también lo haría Fandiño en los de su lote- y endilgarle después unos movidos lances. Con la flámula, en el refugio de los tendidos 5 y 6, con algo menos de ventarrón, desarrolló una labor de pases sueltos, sin ligazón, sobre todo al natural, algunos de los cuales fueron de inmarcesible belleza, sí, pero de uno en uno. 

También echó mano de gesticulantes pases mirando al tendido como preludio a un espadazo. Y como el abono está de rebajas, se llevó una oreja de escaso fuste. Como es lógico, el madrileño aún apretó más en el otro -en el que fue justamente ovacionado el picador Jabato-, pues el bicorne resultó el más bravo en el caballo y codicioso en la pañosa. Pero Abellán, que lo había toreado por templados delantales, anduvo muy despegado y ventajista, y se lo dejó ir en cuanto a toreo clásico se refiere, apostando de nuevo por las formas bien vendidas al cotarro, incluyendo alguna espaldina. Todo ello frustró con justicia su deseo de Puerta Grande. 

Más clásico y ortodoxo anduvo Fandiño, con ganas de borrar su petardo en la encerrona en solitario de hace mes y medio en este coso, Mas su primer burel se apagó pronto en la muleta. Sin embargo mejor fue su labor con el último, otro encastado bicho con fijeza y recorrido al que, tras varios emocionantes pases cambiados festoneó, siempre en el sitio exacto para obligarle, varias tandas sobre la derecha con mando y sabor. 

No se acopló igual por el izquierdo, por  lo que el vasco volvió al redondo y concluyó con unas escalofriantes bernadinas. Se tiró a matar también con mucha verdad pero fue volteado, quedando casi inconsciente en la arena, para recuperarse y endilgarle luego un buen espadazo. La casta del animal retrasó su muerte hasta el segundo aviso, y pese a que florearon más pañuelos que con el de Abellán, ese mal presidente que es Javier Cano no sacó el suyo.

Verdad es que Perera, al que se aguardaba con expectación, se enfrentó al lote menos lucido, pero el extremeño, repetitivo y poco inspirado, amén de ventajista y desarmado una vez en cada bicho, sólo fue capaz, de lucirse con algún bello redondo suelto en ambos.

Ficha del festejo

Toros de PARLADÉ, de buena presencia y estampa, bien armados, manejables y nobles, aunque justos de fuerzas; 4º y 6º bravos y encastados. MIGUEL ABELLÁN:  oreja protestada tras aviso; ovación. MIGUEL ÁNGEL PERERA: ovación tras aviso; silencio tras aviso. IVÁN FANDIÑO: ovación; ovación con petición tras dos avisos. Plaza de Las Ventas, 15 de mayo. 8ª de la Feria de San Isidro. Lleno de 'no hay billetes'.

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