Corresponsales extranjeros indocumentados

Como tantas otras veces, la revista norteamericana The Economist mete la pata cuando se refiere a Cataluña. De hecho, lo que le ocurre al semanario de los Estados Unidos con respecto a este país se repite con otros medios de comunicación extranjeros que parecen no enterarse de la película -también les ha pasado a Financial Times o a The Wall Street Journal-. Sorprende, además, porque siempre se tiene una imagen de sus periodistas como de profesionales rigurosos a los que, desde aquí, se mira con, incluso, una especie de complejo de inferioridad. Pues, como decimos, a veces, demuestran su indocumentación. Ahora, los de The Economist, al señalar a Cataluña como "una de las comunidades más problemáticas de España" por incumplir con los objetivos de déficit. Bueno, a estos señores habría que explicarles que hay una cosa que tal vez no sepan, como es que Cataluña soporta un inmenso déficit fiscal con una España a la que no debe nada -en todo caso es al revés-. Y también pedirles que se documentaran un poco más y no hicieran caso del primer colega de la caverna mediáticofranquista que les intoxica con su versión. Ya se sabe que esta labor pedagógica de corregir los sesgos el president Pujol la hacía muy bien, pues invitaba a estos corresponsales extranjeros a conocer la realidad catalana y que, con Montilla, por cuestiones idiomáticas, fue imposible seguir con la labor. Ahora puede que se recupere el tiempo perdido. Pero tampoco estaría de más que estos periodistas pusieran un poco más de trabajo de su parte para contrastar realidades.