Casos judiciales impresentables

Líos de jueces en una semana en la que dos importantes casos dejan al descubierto lo grave de no renovar el Consejo del Poder Judicial a tiempo.

Por un lado, el caso Malaya y su principal protagonista Juan Antonio Roca. El cerebro de la trama está a punto de salir en libertad. Sólo espera a reunir la fianza de un millón de euros que le ha impuesto el juez Óscar Pérez, encargado de acceder a que el ex asesor de urbanismo de Marbella deje la cárcel pese a asumir que existe “un elevado riesgo de fuga” del supuesto jefe de la trama de corrupción municipal. En este mismo juzgado se ha estimado que la fortuna de Roca supera los 200 millones, por lo que un ‘milloncito’ supondría calderilla para el ex asesor marbellí que ningunea así a la justicia.

El segundo caso que ha conmocionado a la opinión pública y de paso pega un repaso a las actuaciones de los jueces en España, ha sido la actuación del magistrado que investigaba al presunto asesino de Mari Luz. Rafael Tirado Márques, que así se llama el juez, ha sido acusado de no ejecutar en 2006 la condena de prisión contra quien ahora está detenido acusado de matar a la pequeña onubense. Tirado, además, para evadirse de la culpa, señala con el dedo a sus funcionarios como responsables de lo sucedido, con lo que intenta lavarse las manos  en este entramado.

Estos dos casos ponen en evidencia la actuación judicial, y resalta la poca vigilancia a la que están sometidos los magistrados en nuestro país.  ¿Cómo va a salir de esta el poder judicial?