Pero en Génova no van a respaldar de momento la propuesta de la dirección regional ya que hay encuestas que apuntan a que el PP podría arrebatar el poder en el Principado a los socialistas únicamente si el ex ministro fuera el candidato, una opción que respaldan varios barones del PP, entre ellos
Javier Arenas y
Alberto Núñez Feijóo, además de la presidenta de la CAM,
Esperanza Aguirre.
La decisión es para
Rajoy peliaguda habida cuenta de que se decida por uno o por otro, la batalla interna va a estar servida con serio riesgo de que vuelva a haber un cisma en el partido asturiano, al igual que ya ocurrió durante la etapa de
Sergio Marqués, con
Álvarez Cascos de nuevo como protagonista. Así que en Génova esperarán al mejor momento para oficializarla. Y en tal caso de ser elegido exigirán a Cascos que no caiga en la tentación de 'vetar' en su lista a nadie y haya reparto de puestos entre ambos sectores.
Mientras tanto en Oviedo el ambiente está al rojo vivo. El alcalde de esta localidad, Gabino de De Lorenzo, principal detractor del ex ministro, y el propio presidente del PP asturiano,
Ovidio Sánchez, que le respalda, parece que van a por todas y han señalado que con esta decisión “se cierra un episodio lamentable en el PP”, dando por sentado que su decisión es la que debe respaldar la dirección nacional. "El caso está cerrado", ha sentenciado, retador,
De Lorenzo.
Sin embargo, en Génova no parecen estar tan de acuerdo ya que fuentes de la dirección nacional han recordado que la última palabra la tiene el Comité Electoral Nacional y no el Regional. Es más, para la dirección nacional, la propuesta del PP asturiano es tan solo "una opinión".
Las espadas, como se ve, siguen en alto aunque todo el partido espera que Rajoy ponga pronto fin a este ‘culebrón’ para no dañar más las expectativas electorales en aquella comunidad, feudo desde hace décadas del PSOE.
Si (
No(
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