Aprovechando el Auto del juez Pablo Ruz, según el cual no se citará a declarar al secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, al considerar que su testimonio en la causa por la se investiga el 'chivatazo' al aparato de extorsión de ETA "no es determinante" para la investigación de los hechos, Pérez Rubalcaba ha sido más enérgico que nunca en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros: ha repudiado las "calumnias e injurias sobre un secretario de Estado como se han vertido en esta semana".
Recordemos que el teléfono móvil del 'número dos' de Rubalcaba aparece como receptor de varias llamadas mientras un supuesto policía se chivaba el 4 de mayo de 2006 al dueño del bar Faisán, Joseba Elosúa, de que se iba a proceder contra el aparato de extorsión de la banda terrorista. Ese 'chivatazo' motivó que se aplazara más de un mes la citada operación policial.
Pero el auto que el juez Ruz ha hecho público este viernes sobre Camacho ha dado nuevos bríos a Rubalcaba, que ya se encontraba contra las cuerdas, y en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, tras asegurar que "hay una investigación judicial que yo acato y respeto", utilizó el auto del juez "no para defender mi nombre", sino el de Antonio Camacho: "Lleva siete años sirviendo a la seguridad, y esta semana ha soportado injurias y calumnias".
Y abundando en lo anterior, Rubacaba aseguró que "voy a pedir que los que le han difamado, simplemente se limiten a pedir disculpas, lo que antes se llamaba reparar el honor. Creo que no es mucho, dado que es una persona honorable, no es mucho".
No pone la mano en el fuego por Camacho
Mucha seguridad mostró Rubalcaba a la hora de exigir "disculpas", pero hasta por dos veces fue preguntado sobre si "pone la mano en el fuego" porque que Camacho o algún miembro del PSOE o del Ministerio del Interior haya participado en el 'chivatazo' a la red de extorsión de ETA. Y hasta dos veces Rubalcaba se limitó a responder que respeta el trabajo de investigación de los jueces y fiscales, recordando que todas las personas implicadas en la red de extorsión etarra están en prisión o a la espera de juicio.
Es decir, que no pone la mano en el fuego por los susodichos, limitándose a abundar en que "lo que no me parece procedente es que se hagan juicios de valor y se levanten calumnias e injurias sobre un secretario de Estado como ha pasado esta semana".
Si (
No(
