El Ibex, a un paso de los 11.000 la semana que el BCE avista el fin de la crisis

   Los buenos datos del paro de Estados Unidos que publica el Departamento de Trabajo obraron el milagro, después de que pasara sin pena ni gloria la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de mantener los tipos de interés en el mínimo histórico del 1%.

   Tampoco pesó mucho en el ánimo de los inversores que el presidente del instituto emisor europeo, Jean Claude Trichet, avistase indicios de que la crisis global toca fondo, al igual que el presidente norteamericano, Barack Obama, y la OCDE.

   El selectivo madrileño terminó la última sesión de la semana en los 10.947 enteros, que le permitieron marcar el nivel más alto de todo el año y afrontar con más optimismo la cota de los 11.000 enteros.

   El goteo de los últimos resultados empresariales en Europa no fue lo más decisivo para las bolsas del Viejo Continente, que se movieron al son de sendas cifras de empleo de EEUU, que fueron malas el miércoles y buenas el viernes.

   Tras marcar un máximo anual el lunes (10.901), el Ibex no aguantó el martes en la horquilla conquistada a duras penas y bajó hasta 10.800, mientras que el miércoles la puntilla vino de las malas cifras del sector privado, que lo hundieron hasta los 10.700 puntos.

   El selectivo recuperó un poco el aliento y estuvo todo el jueves flirteando con la cota de los 10.800, pero sólo los datos de empleo norteamericano, esta vez buenos y procedentes del Departamento de Trabajo, pudieron darle un empujón de más de 171 puntos.