Tras el fiasco olímpico, Zapatero 'vuelve' a Europa y visita Suecia

Zapatero tiene previsto realizar una ronda de contactos con sus colegas europeos, pero la coordinación con Suecia es prioritaria porque este país asume actualmente la presidencia de turno de la UE y será quien ceda el testigo a España el próximo 1 de enero.

Además, a Suecia y a España les corresponderá poner en marcha las gestiones para aplicar el Tratado de Lisboa si, finalmente, los irlandeses le dan su visto bueno en el referéndum previsto para el 2 de octubre, el segundo que celebrará este país sobre el Tratado.

 Zapatero quiere asegurar una coordinación fluida con el Gobierno sueco para poner en marcha cuanto antes el Tratado de Lisboa. Además, el Gobierno español trabajará por que las nuevas figuras institucionales que introduce Lisboa --un presidente permanente y un Alto Representante para la Política Exterior con mayores competencias que el actual-- se pongan en marcha "lo antes posible" con la "máxima fuerza" y "presencia", según dijo a Europa Press el secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido.

López Garrido subrayó que para España es muy importante "que haya una coordinación" en la lucha contra la crisis, y también continuar con las prioridades suecas en materia de seguridad y lucha contra el crimen organizado. "Haremos un plan de acción", afirmó.

   Junto al Tratado, el segundo tema clave del encuentro entre Zapatero y Reinfeldt serán las medidas para hacer frente a la crisis económica y la posición que la UE llevará a la próxima cumbre del G20 en Pittsburgh (EEUU), aunque los 27 aún tienen pendiente una cumbre --previsiblemente el 17 de septiembre en Bruselas-- para coordinar lo que van a defender en Pittsburgh.

Como adelanto, el Gobierno español ha hecho saber que respalda, en líneas generales, la propuesta francoalemana para regular y limitar de alguna manera los 'bonus' que reciben los directivos de los bancos.

En materia de política económica, no se descarta que ambos mandatarios hablen de la propuesta de la Comisión Europea de agilizar los pagos del Fondo Social Europeo y de los fondos regionales para financiar programas de formación a desempleados u obras en infraestructuras, un plan que Suecia --junto a Alemania, Reino Unido o Países Bajos-- ve con reticencias pero que a España le podría reportar 3.700 millones de euros este año.

En tercer lugar, Zapatero y Reindfeldt repasarán la agenda de la próxima cumbre de Copenhague en el que la comunidad internacional deberá pactar el régimen climático global para el periodo post-2012, un asunto que también interesa a la próxima presidencia española de la UE.