“Tenemos que ser inteligentes, atentos y firmes. Necesitamos que los tribunales nos devuelvan nuestros derechos. Necesitamos la prohibición de viajar como un nivel adicional de seguridad”, afirmó Trump a través de su cuenta oficial de Twitter.
A continuación, Trump lanzó un mensaje a las víctimas del atentado de Londres prometiendo la ayuda de EEUU a Reino Unido. “Dios os bendiga”, concluyó.
Precisamente la colaboración entre Reino Unido y EEUU tras el atentado de hace apenas dos semanas tras el concierto de Ariana Grande en Mánchester fue objeto de la polémica por la filtración estadounidense de información antiterrorista facilitada por la inteligencia británica. En concreto, el gabinete de Theresa May hizo público su malestar por el hecho de que aparecieran publicadas fotografías de la mochila azul usada por el terrorista suicida Salman Abedi para portar los explosivos.
No obstante, no se quedó ahí. Trump aprovechó también para cargar contra el alcalde londinense de familia paquistaní, Sadiq Khan. "¡Al menos 7 muertos y 48 heridos en un ataque terrorista y el alcalde de Londres dice que 'no hay razón para alarmarse'!", tuiteó Trump. El alcalde hubo condenado horas antes los "cobardes" y "bárbaros" actos e instó tanto a los londinenses como a los turistas a que "permanezcan tranquilos y vigilantes" y pidió que acudieran a la policía en caso de que detectasen algo "sospechoso".
Trump defendió acabar con lo "políticamente correcto" para garantizar la seguridad de la población. "Si no somos listos esto sólo será peor", concluyó. A continuación, Trump se metió de lleno en un terreno pantanoso mezclando el atentado con el fácil acceso a las armas en EEUU..."¿Se dan cuenta de que no estamos teniendo un debate sobre las armas ahora mismo? Eso es porque usaron cuchillos y un camión", una frase inquietante puesto que su política de seguridad podría estar centrada precisamente en esto, en el veto de personas que supuestamente sean potenciales terroristas por razón de su origen.