El mensaje de Junqueras ha llegado después de que algunos compañeros de filas como Joan Tardá o Gabriel Rufián, así como el ex president huido en Bruselas, Carles Puigdemont hayan criticado la decisión judicial. Los jueces consideran que existen indicios de la comisión de delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos, además de un riesgo relevante de reiteración delictiva. Mientras Puigdemont ha tildado de 'rehen' a Junqueras, el alto tribunal recuerda que no es ningún preso politico ni que está en la cárcel por sus ideas, ya que "la Constitución admite la defensa de cualquier posición política". El problema no radica pues en que defienda la independencia de una parte del territorio nacional, sino que se han cometido presuntamente varios delitos sobre los que será juzgado: rebelión, sedición y malversación. De hecho, el auto reza explícitamente que "no puede hablarse de presos políticos".