Carmen Calvo ha comparecido en la comisión de Igualdad en el Congreso para dar cuenta de los planes del Gobierno en esta materia. Además de la refoma del Código Penal para considerar 'agresión sexual' (violación) a las relaciones mantenidas sin consentimiento explícito de las partes, el Ejecutivo considera importante hacer más inclusivo el lenguaje para avanzar en igualdad. Por ello, han solicitado un informe a la RAE para que elabore una propuesta de adecuación de la Constitución al al "lenguaje inclusivo".
"Tenemos una Constitución en masculino, de ministros y diputados, que se corresponde a hace 40 años", ha señalado Calvo tras confesar que se sintió incómoda al jurar su cargo como "ministro", cuando además el suyo es el Consejo con mayor presencia femenina de nuestra democracia (11 mujeres frente a 6 hombres). Desde que juraron su cargo, los miembros del Ejecutivo se han referido a sí mismos como 'Consejo de Ministras y Ministros', un intencionado 'guiño' a ese lenguaje inclusivo.
Más allá de la posible reforma de la Carta Magna, Calvo ha detallado que es preciso adecuar su lenguaje "con la realidad de una democracia que transita entre hombres y mujeres".
La referencia de Consejo de Ministras y Ministros por la presencia mayoritaria de mujeres en el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha sido el último 'guiño' a la visibilización de las mujeres en el lenguaje. Hace solo unos meses, Irene Montero, se vio envuelta en la polémica por utilizar la palabra 'portavoza' durante una rueda de prensa en el Congreso.
El hecho de emplear el femenino en un término común en cuanto al género, con el objetivo de "visibilizar a las mujeres", según ella misma defendió le valió las críticas en redes sociales, la burla del Ministro de Educación y varias aclaraciones por parte de la RAE. La RAE también salió al paso y cargó contra el uso del término 'miembras' por parte de la entonces ministra de Igualdad, Bibiana Aído durante una comparecencia en el Congreso en 2008.