Además, han advertido de que "las próximas 48 horas serán críticas". Todo parece preparado para que el vicepresidente Mike Pence asuma temporalmente sus funciones en caso de baja médica prolongada.
Incluso el presidente escribía un tuit diciendo que se encontraba "bien".
Trump, fue trasladado el viernes a un hospital militar por "precaución", pero permanecía con buen ánimo, síntomas leves y había estado "trabajando" durante todo el día en sus labores presidenciales.
Por precaución y por recomendación de su médico y expertos, el presidente trabajará desde las oficinas presidenciales del (hospital) Walter Reed los próximos días", dijo en un comunicado la portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany.
El helicóptero presidencial recogió a Trump en la Casa Blanca y lo llevó hasta el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, ubicado en Bethesda (Maryland), a las afueras de Washington.
La decisión de trasladar a Trump llegó después de que el médico del presidente en la Casa Blanca, Sean Conley, explicase que al mandatario se le administró una dosis de 8 gramos del cóctel experimental de anticuerpos de la farmacéutica Regeneron.
Además, el mandatario ha estado tomando "zinc, vitamina D, famotidina" -un medicamento para tratar las úlceras o el reflujo gástrico-, melatonina (una hormona para tratar los trastornos de sueño) y una aspirina diaria, precisó el doctor.
La primera dama, Melania Trump, quien también dio positivo, "sigue estando bien, con solo una leve tos y dolor de cabeza, y el resto de la familia (de Trump) se encuentra bien y hoy dieron negativo por SARS-CoV-2", concluyó el médico.
El mandatario, de 74 años, reúne varios de los factores de riesgo para desarrollar síntomas más graves de COVID-19 debido a su edad, su género y la obesidad que padece.