Tras un encuentro in extremis la noche del lunes, PSOE y Unidas Podemos han llegado a un acuerdo de mínimos para redactar un borrador de los Presupuestos Generales de 2021.
Para escenificar el pacto, el presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y el vicepresidente segundo y secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, han presentado en Moncloa las líneas principales de las cuentas del Estado, han descrito el espíritu en que se basan y han destacado algunos de los impuestos que subirán, tema estrella sin igual en los Presupuestos.
"Hoy presentamos los Presupuestos de 2021. Unas nuevas cuentas para reconstruir España, modernizar la economía y fortalecer el Estado del bienestar. Unos presupuestos progresistas y de país, con la mayor inversión social de nuestra historia, para salir adelante con ímpetu y hacerlo juntos", contó Sánchez en la comparecencia.
Iglesias defendió que estas cuentas "inauguran una nueva época en la política económica en España. Dejamos atrás definitivamente la etapa neoliberal de la austeridad y los recortes y marcamos un horizonte de transformaciones económicas, refuerzo de lo público y justicia social". "Frente a las viejas recetas, existe una mayoría parlamentaria plural que está llamada a transformar nuestra patria en un sentido progresista y que volverá a expresarse para hacer realidad el compromiso histórico que representan estos Presupuestos", añadió.
Además, Iglesias destacó que se va a facilitar el acceso al Ingreso Mínimo Vital, que tantos problemas está dando para el cobro a miles de ciudadanos.
Se limitará las deducciones en el Impuesto de Sociedades, fijará una tributación mínima del 15% para 'socimis' y reducirá desgravaciones de planes de pensiones privados.
Ahora, el Gobierno tiene un plazo de 4 meses para aprobar los Presupuestos de 2021 y para ello necesitará una mayoría parlamentaria que no tiene garantizada.
Con el 'no' garantizado de PP, Ciudadanos y Vox por el espíritu de izquierdas de estas cuentas públicas, las fuerzas que integran el Ejecutivo de coalición intentarán lograr los votos de partidos de diversa índole.
Arranca una dura fase de negociación con los grupos catalanes, ERC y JxCat, menos dura con los vascos PNV y EH Bildu.
Otros partidos minoritarios como Más País-Compromís, BNG, PRC, Teruel Existe... serán también parte de los contactos para aprobar las cuentas.