En declaraciones a los medios antes de participar en la presentación del Contrato-Programa de Renfe 2006-2010, Álvarez quiso enviar a la ciudadanía de la zona afectada "un mensaje de tranquilidad", insistiendo en que no se verán afectados por las "incomodidades del gas" que emana del barco y que produce irritación en las mucosas.
Para ello, el buque se mantendrá inmovilizado "en un sitio de la mar donde no cause molestias y tenga la mayor seguridad posible", y donde se garantice "que no se produce ningún tipo de contaminación" derivada de la descomposición de las 6.012 toneladas de fertilizantes agrícolas.
Según explicó Álvarez, concretamente para el día de hoy se ha previsto "tratar de enfriar la carga, ventilar y conseguir aminorar la reacción que se está produciendo", detalló.
Para concluir, la responsable de la cartera de Fomento afirmó que las autoridades habían puesto en su conocimiento la llegada de
"dos técnicos de Noruega" y terminó con un agradecimiento a la labor de los expertos españoles en el caso.