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Tras de tres días consecutivos de aplicarse en el Valle de México la medida de pre contingencia ambiental por ozono, esta tarde decidió suspenderla por lo que mañana podrán realizarse las actividades normales al aire libre en escuelas, pero también en áreas públicas.
La Comisión Ambiental Metropolitana (CAM) tomó esta determinación luego de que el máximo nivel de contaminación registrado este lunes fuera de 118 puntos del Índice Metropolitano de la Calidad del Aire (IMECA) en la zona suroeste, estación Pedregal.
De acuerdo con la Dirección General de Proyectos Especiales de la Secretaría de Obras, se detuvieron los trabajos en todos los frentes del Circuito Interior, donde se lleva acabo la sustitución de pavimento por concreto hidráulico
De igual forma se suspendieron los trabajos en la construcción del puente vehicular de Molinos y Revolución.
Terminó tercer día con altos índices de contaminación en el DF
La Comisión Ambiental Metropolitana (CAM) de la Ciudad de México mantuvo hasta esta tarde, por tercer día consecutivo, la "precontingencia" ambiental, una alerta por los peligrosos índices de contaminación, que de mantenerse podrían tener consecuencias para la salud de los habitantes.
La alta concentración de ozono actual en la capital mexicana, una mancha urbana de unos 20 millones de habitantes si se toma en cuenta su zona metropolitana, puede provocar lagrimeo en los ojos, dolor de cabeza, sequedad nasal o ardor de garganta, indicó la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios.
En declaraciones a Efe, el director de la Red Automática de Monitoreo Atmosférico de la Secretaría de Medioambiente de la alcaldía capitalina, Armando Retama, explicó que la situación se debió a que hubo un estancamiento del aire sobre el Valle de México provocado por un sistema anticiclónico.
El aire no se estaba moviendo, estaba estancado y en el momento en el que había radiación solar se transformaba en ozono y hacía que los grados del Índice Metropolitano de la Calidad del Aire (Imeca) aumenten y se tuviera que alertar a la población declarando la fase de precontingencia, que precisamente terminó la tarde de ayer lunes.
Desde el viernes se alcanzaron niveles máximos de concentración de 180 puntos Imeca, el valor de referencia para que la población de grandes ciudades conozca los niveles de contaminación ambiental, el sábado 168 puntos y el domingo 163 puntos.
Desde que en 1998 se establecieran las fases de precontingencia (a partir de 160 puntos Imeca), contingencia (a partir de 185) y fase 1 (más de 195 puntos), esta es la única vez en la que la primera ha debido mantenerse por 72 horas seguidas.
Según apuntó Retama, si se llega a la fase 1 existe una situación de riesgo muy alto para la población, que podría sufrir daños importantes en su salud, especialmente en la de los niños, ancianos y los que tienen problemas respiratorios y cardiovasculares.
"El ozono es un oxidante muy fuerte y, si entra en altas cantidades a los pulmones, produce de manera inmediata un daño que causa deficiencia respiratoria", añadió.
Retama explicó además que la norma oficial mexicana establece que para proteger la salud pública no se debería de exceder los 110 puntos Imeca durante una hora, una vez al año, mientras que hoy en día "estamos alcanzando una concentración cercana a los 170 puntos, por lo que estamos muy por encima de lo que recomienda la norma".
La principal causa de la contaminación en Ciudad de México es la elevada concentración de automóviles, a un ritmo de 35 millones de desplazamientos diarios.
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