www.diariocritico.com

Secretario General de CCOO Madrid

Javier López: "Madrid ha perdido año y medio en la gestión de la crisis"

sábado 21 de febrero de 2009, 13:33h
El secretario general de CCOO Madrid, Javier López, llega al noveno Congreso regional del sindicato con la intención de renovar su mandato por tercera y última vez. Sus retos más importantes son la gestión de la crisis dentro del diálogo social con la Comunidad de Madrid y la patronal, y aunar las distintas tendencias en la directiva del sindicato para gestionar la crisis. 

¿Cómo afronta Comisiones Obreras el nuevo Congreso?
Llegamos en muy buenas condiciones de salud física y en peores condiciones de salud mental. Yo creo que los trabajadores madrileños han depositado en Comisiones Obreras una confianza mayoritaria, con más de 166.000 afiliados y 17.000 delegados en la Comunidad de Madrid. Somos la primera fuerza sindical a 10 puntos porcentuales de la segunda. Por nuestra capacidad para negociar convenios colectivos, nuestra presencia en la defensa diaria de los intereses de los trabajadores.

Lo de la salud mental se refiere a que afrontamos este Congreso en un momento de gran preocupación para los trabajadores y trabajadoras. Llevamos desde el último cuatrimestre de 2007 en un proceso de crisis que nos ha colocado en una muy mala situación porque España y, en especial Madrid, ha mantenido la construcción y los servicios inmobiliarios como motor del movimiento económico. Todos los sectores han iniciado en 2008 una caída en picado. A lo largo del último trimestre estamos contemplando como el sector industrial está resultando afectado, fruto del menor consumo. A Madrid le está golpeando esta situación: hemos perdido 106.000 trabajadores afiliados a la Seguridad Social, hemos bajado de los tres millones de trabajadores afiliados a la Seguridad Social en Madrid, y hemos visto crecer el desempleo hasta las 370.000 personas.

¿Qué causas encuentra para vivir este periodo de buena salud en el sindicato?
Somos un sindicato confederal en el que procuramos representar a todos los trabajadores desde su realidad sectorial y a la vez estamos implantados en todos los sectores. Recogemos toda la diversidad de sectores de la Comunidad de Madrid. En segundo lugar, porque somos un sindicato plural. No ponemos topes ideológicos a los afiliados. Hay pluralidad en la representación de las ideas políticas que existen en la sociedad. En tercer lugar, porque hacemos convivir esa diversidad de sectores y esa pluralidad de ideas en esa voluntad de querer participar en las decisiones. Nuestra autonomía, independencia e integración de todos son valores que nos caracterizan. Saben que no nos vendemos a una idea política y eso hace que los trabajadores confíen en nosotros.

¿Cuáles son las propuestas que trae a este Congreso?
Son propuestas vinculadas, en el ámbito externo, a la revisión del modelo de crecimiento. Hemos vivido del ladrillo, de servicios inmobiliarios y de baja calidad. Hemos vivido de la precariedad laboral en muchas empresas. Contratos temporales que alcanzan al 20 por ciento de los trabajadores madrileños. Creemos que lo primero que tenemos que hacer es revisar este modelo de crecimiento. Hay que apostar más por la industria; por la innovación de productos y servicios; y en un momento de crisis, hay que ponérselo fácil a las pequeñas y medianas empresas que están sufriendo más la crisis. Y desde el punto de vista del empleo, creemos que esas 370.000 personas en situación de desempleo puedan vivir manteniendo rentas, su poder de consumo y su capacidad de no verse empobrecidos por la crisis. Por tanto, mayor protección a los desempleados, mayor capacidad de búsqueda y orientación laboral, mayor formación laboral para los trabajadores, y un futuro empleo más estable. Y en el ámbito interno, el reto es superar fracturas que puedan haberse originado en el pasado, reunir las distintas sensibilidades del sindicato en los órganos de dirección porque todos tenemos mucho que decir en un periodo de crisis largo, duro y que va a requerir de los esfuerzos de todos.

¿Qué les diría a los trabajadores con respecto a la crisis?
Vamos a pasar por momentos muy duros en los que estar organizados es fundamental. La fuerza de nuestra unidad es esencial para combatir esta crisis y defender a los trabajadores ante la misma. Ya sea en un problema en una empresa, en la protección de los desempleados, ya sea en la consolidación de las empresas de esta región y el futuro de trabajo estable y sólida que queremos para la Comunidad de Madrid.

¿Cómo ha afectado la crisis a la región?
Los últimos escándalos de esta región ponen de relieve su forma de vivir. Somos una comunidad autónoma que ha vivido de la recalificación de suelos y de la privatización de servicios públicos. Por contra, no hemos puesto atención al sector industrial, que es la base más sólida del crecimiento de una región. Mientras que Cataluña aglutina más del 23 por ciento de los negocios de este sector, Madrid sólo produce el 10,8 por ciento del volumen nacional. Otras comunidades ya nos pisan los talones en este sentido. Nos hemos fiado de que la riqueza de la Comunidad provenía en un 80 por ciento del sector servicios, y que eso valía. Pero esta crisis ha puesto de manifiesto que los servicios de mala calidad y la especulación inmobiliaria son una bomba de relojería.

Es fundamental, si Madrid quiere pesar en la definición del futuro económico en España, promover una mayor base industrial de calidad, consolidar los servicios y reconvertir el sector de la construcción sin especular. También hay que reactivar la obra pública para que no se hunda el sector. No podemos estar de acuerdo en que la solución a la crisis es el modelo chino. No competiremos con otros países en bajos niveles salariales y baja calidad de productos. Tenemos que competir con mayor innovación, calidad y productividad, como hace Europa, que fortalece su base productiva y el empleo de calidad.

¿Qué perspectivas observan del plan de choque que está desarrollando con la Comunidad de Madrid y la patronal?
Llevamos dos años exigiendo al Gobierno regional que reúna el Consejo de Madrid. Muy especialmente desde el momento en que estalló la crisis. Pedimos que se constituyesen dos mesas de trabajo: una de economía y otra de empleo. Creemos que son las dos patas que sustentan el futuro de esta región. En la mesa de la economía acudimos con la idea de intentar salvar empresas.

Vamos a intentar buscar vías de financiación que solventen los problemas transitorios de las pymes, de mantener el empleo, de apostar por la innovación, de introducir más recursos para ser más competitivos, de que se comprometan las entidades financieras y se reinviertan beneficios empresariales en el futuro de las empresas. En la mesa del empleo abordaremos cómo atender a las personas que se queden sin prestación por desempleo. Estudiaremos cómo se compromete a las entidades financieras con el futuro, no sólo de las empresas, sino también de las familias. Creemos que debemos proponer medidas urgentes que protejan a las personas desempleadas, que fortalezcan los servicios públicos y actúen en nuevas posibilidades económicas, como las que plantea la Ley de Dependencia.

En esa negociación ¿en qué consideran que pueden ceder los sindicatos?
No se trata de que nadie ceda, sino de que todos pongamos encima de la mesa problemas y soluciones. No voy a exigir al Gobierno regional o a los empresarios que cedan. Les exigiré que pongan recursos para que las familias madrileñas soporten con la menor intensidad posible la crisis y que las empresas no tengan que cerrar sus puertas. Lo que no vemos bien es que los trabajadores paguemos una crisis que no hemos producido y que ya estamos sufriendo en aumento del desempleo, en una negociación colectiva más dura, en que las mejoras salariales se van a ver comprometidas por la situación de la empresa. Los trabajadores ya aportamos nuestra responsabilidad a la negociación colectiva, nuestra responsabilidad en los Expedientes de Regulación de Empleo y estamos pagando la crisis en aumento del desempleo.

Los empresarios madrileños proponen el abaratamiento del despido.
¿Cómo es posible que en la situación de crisis actual un tercio de los beneficios se reparte en dividendos entre sus ejecutivos mientras que al mismo tiempo estos empresarios piden que los despidos sean más baratos? Esto es una irresponsabilidad, es apostar por el pasado y no hacia el futuro. Esta situación económica no tiene que ver con el despido. Ni tan siquiera con los salarios. Cuanto menos ganemos los trabajadores, que somos los más, menos vamos a consumir y más se alargará la crisis, porque el mercado necesita un mantenimiento del consumo. Cuanta más incertidumbre se cree en las familias trabajadoras pensando que puedan verse en el paro, facilitando y abaratando los despidos, menos confianza tendremos en el futuro y en abordar la compra de bienes importantes para nosotros.

¿Cómo afecta al trabajador esta propuesta?
Los empresarios ya tienen mucha facilidad para despedir. Sólo en Madrid hay más de 700.000 personas con un contrato temporal. Que con que no les renueva les garantiza despido fácil y barato. La segunda fórmula son los ERE. La administración no pone demasiadas pegas a los expedientes de regulación de empleo. Se están utilizando también las quiebras y suspensiones de pagos, que supone que las empresas entran en periodos concursales en los juzgados y los trabajadores quedan postergados en el cobro de sus salarios. Y la última vía es el despido improcedente.

Un reciente estudio de Comisiones Obreras pone de relieve que la media de indemnización por despido es de 19,1 días por año. Es decir, de hecho ya los empresarios están despidiendo por menos de 20 días por año trabajado como término medio. El plantear un 'contrato de crisis' no sé si es para que que los empresarios reelijan a Gerardo Díaz Ferrán como presidente de la CEOE. También se puede usar para distraer. Arturo Fernández -presidente de CEIM- dice que hay que aplazar impuestos y abaratar el despido. Todo eso lo tendría que hacer Zapatero. Que lo arregle él y Esperanza Aguirre no haga nada. O sea, pegar una patada hacia arriba para que otros resuelvan los problemas de la Comunidad de Madrid. 

¿Qué nota le pondría a la Comunidad de Madrid en la gestión de esta crisis?
Por ahora, y como le gusta decir a Esperanza Aguirre, 'cero patatero'. Hemos perdido año y medio y no se ha hecho nada. Hay que sentar a las partes y buscar soluciones. Un Gobierno tiene que entender siempre que los ciudadanos le han elegido para gestionar lo que es de todos, no para hacer lo que le da la gana. Debe mantener la atención y el diálogo permanente de la sociedad. Yo lo que habría hecho ante los menores avatares de la crisis es reunir a los empresarios y sindicatos, sentarnos y analizar qué está pasando y qué podemos hacer por poco que sea. De eso no se ha hecho nada. Unas cuantas medidas propagandísticas, que no tenemos idea de la incidencia que están teniendo, pero no hay medidas contra la crisis. Por eso hemos planteado un plan de choque para salvar a las empresas de la crisis, a los trabajadores y a los desempleados. Y hay que hacerlo rápido.

¿Cómo se está desarrollando el Pacto por el Empleo con el Ayuntamiento de Madrid, UGT y CEIM?
El que el Ayuntamiento de la capital haya dado este paso tiene relevancia importante porque marca el camino para el resto. La constitución del Consejo Local de Madrid significa que el Ayuntamiento de Madrid está siguiendo el camino correcto. Otros ya están empezando a hacerlo como Alcorcón y Aranjuez. Y otros ya lo habían hecho como Arganda del Rey y Alcalá de Henares. Hay que crear en los municipios espacios de concertación y de diálogo entre empresarios, sindicatos y gobiernos locales. En este caso, es un acuerdo que está funcionando con sus mesas abiertas en materia de empleo, de economía, de desarrollo social y territorial y que, como todos los acuerdos, tiene sus insuficiencias porque hay mesas que se desarrollan más deprisa que otras. En cualquier caso, hay que resaltar que es un modelo de referencia. Es un buen ejemplo de cómo proceder en un momento de crisis. En el caso de Alberto Ruiz-Gallardón, hay que reconocer que ha sido el primer alcalde de Madrid que ha reunido a empresarios y sindicatos para crear un espacio de concertación permanente como éste.

¿Cómo incide en la economía madrileña el Fondo Estatal de Inversión Local?
Es una medida importante pero limitada. Es importante porque va a los ayuntamientos y, especialmente, a obras para hacer cosas. Pero es limitada porque debería ir acompañada de otras medidas que subsanen los serios problemas de financiación de los ayuntamientos. Porque mientras el Gobierno central ha transferido competencias a las comunidades autónomas, éstas no han transferido competencias a los ayuntamientos. Y los ayuntamientos sacan sus recursos de la recalificación de las licencias de obra. Como ahora no hay, los ayuntamientos no ingresan y no hay una financiación municipal estable garantizada por las comunidades autónomas.

Por eso, la medida favorece pero no soluciona los problemas de los ayuntamientos. Hay muchos ayuntamientos que han dejado de pagar a las contratas, comprometiendo seriamente su futuro. Por tanto, nos parece bien que haya dinero para obras pero nos parecería aún mejor que se diese dinero para acometer los pagos. Y nos parecería todavía mejor que las obras que se hagan sean obras de futuro que, aunque se tengan que realizar en más tiempo, pervivan en el tiempo creando empleo y asegurando un mantenimiento futuro. Pero eso no se puede hacer con este Plan.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios